La familia de Schumacher, endeudada para mantener al piloto con vida

Hace más de cuatro años que el heptacampeón de Fórmula 1, Micheal Schumacher sufrió un trágico accidente mientras esquiaba en los alpes franceses. El gran accidente que sufrió le causó un traumatismo craneoencefálico, con hematomas intracraneales y enemacerebral que lo dejó en coma durante días.

El mundo del motor se volcó con la leyenda de los coches tras conocer el trágico suceso y aún está presente en la Fórmula 1. El estado de salud del alemán sigue siendo el mismo: vegetativo. El piloto pudo ser trasladado junto a su familia a la mansión que tiene en el lago Geneva, después de someterse a una última operación que no mejoró su estado, y desde entonces no se conocen nuevas noticias del piloto. 

Lo que si se sabe es que los costes del tratamiento son muy elevados y están empezando a hacer estragos en la economía de la familia del campeón. Corinna Betsch, su mujer, sigue al corriente de cada movimiento, aunque no parece que la situación vaya a cambiar demasiado a pese al imponente despliegue médico.

la cabana de schumacher valorada en 25 millones de euros

La cabaña de Schumacher valorada en 2,5 millones de euros 

Jean Todt, expresidente de la FIA, señala que el alemán sigue debatiéndose entre la vida y la muerte y que la familia sigue aferrándose a un milagro. Según informan fuentes cercanas, la factura médica para mantener con vida al piloto ronda ya los 165.000 dólares a la semana. En total, la familia de Schumacher se habría gastado unos 26 millones de dólares.

Por ello, la mujer del piloto, Corinna se habría desprendido de varios bienes de la familia, entre ellos una cabaña de 645 metros cuadrados en Noruega con un valor de dos millones y medio de euros o un Rolls Royce que ha vendido por 380.000 euros. Aun así, la mayor venta de la familia parece que está por llegar. Los Schumacher contemplan la venta del avión privado de la familia, un Falcon 2000 EX que podría salir a la venta por un precio de 20 millones.

Con esa venta, se podría hacer frente a los costes médicos durante un buen tiempo, ya que la familia mantiene la esperanza.