Canals d'Urgell: descubriendo los senderos de esta larga vía verde

Si los astros se alinean y el fin de semana se presenta soleado, nada como hacer algún que otro plan en familia disfrutando al aire libre y de la naturaleza. Un par de días de desconexión que bien puede tener la zona de Canals d'Urgell como perfecto escenario para hacer senderismo o bien usando la bicicleta mientras se recorre la que es una de las vías verdes más larga de toda Europa. 

Lo curioso es que en esta zona donde los recorridos siguen el curso de una canalización de agua, hace siglos era todo tierra. Sin embargo, todo cambió a finales del siglo XIX cuando se dio el paso de acometer un proyecto hidrográfico en esta zona que hoy en día, en pleno siglo XXI, pueden disfrutar grandes y pequeños en una ruta de lo más agradecida. 

Un poco de información

El canal principal tiene una longitud total que se acerca a los 150 kilómetros y de él derivan las cuatro acequias principales. En la actualidad, todo este reguero principal abastece de agua a más de 50.000 hectáreas de tierra y a cerca de 77.4000 habitantes de estas comarcas.

Historia que ahora se puede conocer, antes de dar un paseo por la zona, en el Espai Cultural dels Canals d’Urgell que se encuentra en la llamada Casa Canal en la localidad de Mollerussa. Precisamente, en este pueblo residieron hasta el año 2003 buena parte de los trabajadores de esta impresionante obra de ingeniería y sus familias. 

Vista aérea de los Canals d'Urgell / COMUNIDAD GENERAL DE REGANTES DE LOS CANALES DE URGEL

Un recorrido en plena naturaleza

Ponerse a andar, o bien ir montado en una bicicleta, por esta zona es hacer un recorrido en un escenario donde los protagonistas son los campos de cultivo y los árboles frutales en plena provincia de Lleida. Y es que el Canals d’Urgell se encuentra diseminado entre las comarcas del Urgell, el Pla d’Urgell, las Garrigues, el Segrià y la Noguera. En total más de 300 kilómetros de caminos y senderos que se van enlazando para dar vida a una de las vías verdes más extensas de todas las que hay en Europa. 

Eso sí, en la mayoría de los casos resulta imposible hacer todo ese trayecto, y menos si se van con niños pequeños. Por eso, lo mejor es disfrutar de este bello paisaje en tonos ocres y rojizos a poco a poco y en varios días o escapadas para no perderse ni un detalle de este paseo en plena naturaleza. Pero no solo para admirar la belleza natural. Durante este placentero recorrido, el visitante podrá ver algunas de las viviendas donde vivían los antiguos guardianes de la zona. Casas que formarán parte en un futuro de un proyecto de rehabilitación y turismo sostenible. 

Centro de interpretación

El Espai Cultural dels Canals d'Urgell hace las veces, por tanto, de museo, centro de exposiciones y espacio de interpretación para que todo aquel que lo desee pueda conocer de primera mano todo el proceso de transformación y construcción hasta lo que hoy se ve como parte de los Canals d'Urgell. Un recorrido visual, histórico y patrimonial donde se dan la mano pasado, presente y futuro en este impresionante proyecto de ingeniería hidráulica.

Y es que, en su momento, esta obra no solo fue todo un revulsivo para la comunidad de regantes de las tierras de la comarca de L'Urgell, sino que trajo consigo toda un cambio evidente en el entorno desde un punto de vista natural, pero también económico y social. Las visitas guiadas se deben concertar con antelación y se pueden hacer tanto en castellano como en catalán. 

Abrirse a la sociedad

Este es uno de los objetivos que se marcan desde este espacio, así como dar a conocer los proyectos futuros vinculados al territorio tal y como recuerdan los responsables de la nueva fundación de la Comunidad General de Regantes de los Canals d'Urgell. Con esta idea mente, la sala grande de exposiciones del centro interpretativo se modificará para acoger un montaje que explique todo el proceso de modernización del canal, al mismo tiempo que tras los meses más duros de la pandemia se van recuperando poco apoco las visitas guiadas a escuelas y particulares.

Precisamente, los más pequeños son protagonistas de este centro expositivo ya que en la visita guiada para ellos se ha incorporado la figura de un títere, el canaler Isidor, que es el encargado de explicar cómo se hizo la transformación de esta zona que era completamente de secado a otra de regadío donde el agua es la absoluta protagonista. Sin duda, una oportunidad única para que estos curiosos visitantes conozcan el valor de este bien natural tan preciado y aprendan a usarlo de forma consciente y responsable.