Imagen de una terraza llena de público por la tarde / EFE

Imagen de una terraza llena de público por la tarde / EFE

Estilo

El 'tardeo' se asienta con fuerza en España

La moda de salir por las tardes se practica, cada vez más, en distintas zonas del país expandiéndose como la gripe

23 diciembre, 2019 14:40

La moda del tardeo llega para asentarse en España, pasando de una Comunidad Autónoma a otra contigua como si de un resfriado se tratara. Más que una moda, ya es un hábito en cada vez más lugares de la península, dejando claro que para pegarte un buen fiestón no es necesario ver amanecer. 

De hecho, consiste en salir antes de que se ponga el sol, por la tarde, pero igual que se salía por la noche. Afianzándose en los españoles nacidos entre los 60 y los 80, se empieza con el vermut, pasando a las tapas y cañas, para terminar con las copas de turno. 

Práctica de origen desconocido

En España, una bodega resulta un sitio ideal para empezar con el 'tardeo' / CG

En España, una bodega resulta un sitio ideal para empezar con el 'tardeo' / CG

La última batalla territorial de España es la disputa por quién tuvo la gran idea. Mientras que los de Albacete dicen que fueron ellos, los murcianos lo reclaman como suyo. Lo que sí está claro es que primero y segundo, o viceversa, ampliaron la tendencia hasta Alicante. Allí se bifurca hacia Valencia y Baleares, pero sigue ascendiendo hasta Zaragoza y adentrándose en las dos grandes: Barcelona y Madrid, donde tratan de darle una vuelta y crear el Tardeo 2.0.

Celebrado principalmente por cuarentones y cincuentones a los que no se les ha ido el gusanillo de los bailoteos y las tajas tontas, dejan a los niños con familiares o canguros y llegan justo para la cena. Descansan temprano y, al día siguiente, listos y frescos para aguantar el ritmo de los más pequeños.

Dos variantes a seguir

Un grupo de amigos brinda con cerveza en una salida de 'tardeo' / CG

Un grupo de amigos brinda con cerveza en una salida de 'tardeo' / CG

La primera, la de los padres concienciados, son aquellos que regresan a casa a cenar o recién comidos para reponer fuerzas y levantarse sin resaca. Los otros, son aquellos que empalman la cena con la generación millennial para seguir sin fin hasta que el cuerpo aguante. Y si hay que descansar, ya se dará con la siesta.

Además de ser ideal para reponer fuerzas, los que lo practican aseguran que es mucho más barato que salir de fiesta. Comes y bebes, sobretodo, de igual manera que lo harías a las cuatro de la madrugada en una discoteca. Pero lo que te gastarías en una noche de locura, te da para tres tardes de tardeo.

'Tardebuena' y 'tardevieja'

Ahora mismo, en Murcia, esta nueva práctica acapara el 55% del ocio y la noche, el 45. Ha transformado el ocio de la ciudad y pueblos como Cartagena o Lorca, donde hay quien habla de otro fenómeno casi exclusivo de la región: la tardebuena y la tardevieja. Hay que entender que el año pasado, por ejemplo, estuvieron a 25 grados por la tarde en Nochevieja. Por eso, desde hace años, el Ayuntamiento corta los dos paseos principales de Murcia y permite que los pubs saquen barras a la calle.

El vermut, la bebida ideal para los practicantes del 'tardeo' / CG

El vermut, la bebida ideal para los practicantes del 'tardeo' / CG

Este cambio, en teoría, aligeraba las noches con el consiguiente alivio para los vecinos. Si antes había doce o trece discotecas, ahora quedan cuatro o cinco. Y con el tardeo, la Nochevieja, por ejemplo, se ha quedado, salvo excepciones, para los menores de 30 años.

Menos discotecas en España

El número de discotecas en España ha caído, según una información de La Vanguardia, de 5.000 a solo 1.800. Aguantan, sobre todo, en las grandes ciudades y en la costa. El ocio se resiente por la pirámide demográfica, los veinteañeros son menos que los cuarentones, con datos que ayudan a entender la decadencia de las discotecas. Porque el modelo de ocio nocturno, que aún tiene su músculo, está reinventándose.

No hay más que ver que la nueva generación bebe más cerveza (un aumento del 18%) y menos bebidas espirituosas (un descenso del 17%). Hay que adaptarse a los profundos cambios en las tendencias del consumo de ocio, la evolución demográfica y el envejecimiento de la población. El ocio nocturno es cada vez más diurno, cultural y familiar, más diverso y más inclusivo.