Cómo visitar la fábrica de Estrella Damm

La cerveza Estrella Damm es una de las más famosas del mundo. Nació en Barcelona en 1876 de la mano del francés August Kuentzmann Damm, quien dejó un gran legado a las generaciones venideras. Él no pudo disfrutar de su empresa, ya que murió apenas un año después de fundarla. Desde entonces, la cerveza Estrella Damm cuenta ya con casi 250 años de tradición, un tiempo en el que sigue conservando su receta original, a base de malta de cebada, lúpulo y arroz.

Esta cerveza tipo lager se elabora solo con ingredientes naturales. En su palmarés cuenta con el honor de haber sido nombrado como mejor cerveza española en el certamen New York International Beer Competition de 2015. Su graduación de alcohol es de 5.4% y actualmente llega a más de 70 países. Por supuesto, es el mercado español (y más concretamente el mediterráneo) donde más se consume, pero entre sus mercados internacionales más destacados se incluyen Estados Unidos y Reino Unido.

La fábrica

En El Prat de Llobregat se encuentra la fábrica de Estrella Damm, donde se elabora y distribuye una de las mejores cervezas del país, con gran fama internacional. Su fábrica se puede visitar y se puede descubrir cómo es una fábrica de cerveza por dentro. Pasando por las salas de cocción, también se conocerán cómo son los tanques de fermentación e incluso cómo funciona la planta de envasado. En sus visitas guiadas explican paso a paso todo el proceso de elaboración de esta cerveza 100% natural.

Además, también es un buen momento para descubrir la historia de la marca con más detalle e incluso conocer algunos secretos y curiosidades que han llevado a Estrella Damm a tener la reputación que tiene hoy en día. Los mayores de edad podrán terminar la visita con una degustación de cervezas. Pueden acudir menores de edad a ver la fábrica, siempre que vayan acompañados de un tutor legal y por supuesto siempre que no consuman alcohol en ella.

Degustación de cerveza en la fábrica Estrella Damm / Photo Mix EN PIXABAY

La visita

Como ya se ha comentado, la visita a las instalaciones de la Fábrica Damm es muy completa e incluye diferentes salas y estancias en las que se puede descubrir todo el proceso desde que comienza a prepararse hasta que se embotella para llegar al consumidor final. En esta visita se incluye una cata de 4 o 6 bebidas de la familia Damm, además de visitar la tienda en la que se pueden comprar sus cervezas, copas, vasos y otros productos relacionados con esta empresa.

Todas las visitas deben reservarse previamente. Se pueden coger visitas individuales dentro de las sesiones que hay programadas cada día, de lunes a domingo, o por grupos de más de 12 personas en los casos en los que se desee convocar una visita especial. Las visitas están disponibles en castellano, catalán e inglés.  La duración es de 90 minutos en total, incluyendo 60 minutos de explicación y recorrido y 30 minutos de cata.

Cómo se hace

Los interesados en saber cómo se hace la cerveza Estrella Damm podrán conocer en esta fábrica todo el proceso. Los responsables de la visita contarán a los asistentes algunos datos curiosos, como que, para lograr esta bebida, se necesita fermentar la cerveza durante una semana en los tanques de fermentación y a continuación pasarla a los tanques de guarda durante dos semanas más. 

Para el envasado se utilizan procesos modernos de tecnología con los que se busca combatir la oxidación y la contaminación microbiológica. Estos son dos enemigos del sabor, que pueden empeorar la experiencia con la cerveza.

Cómo llegar a la fábrica

La fábrica Damm se encuentra en Ronda de Ponent, 41, en la localidad de El Prat de Llobregat, muy cerca de la capital de la provincia, de hecho, se puede acceder en metro desde diferentes puntos del centro de Barcelona. Como referencia, se puede indicar que está a apenas 2 kilómetros del aeropuerto.

Quien desee acudir en transporte público, puede tomar la línea L9S y bajar en Parc Nou o bien tomar el autobús PR1 bajándose en la parada Avinguda Onze de Setembre. La distancia caminando desde el metro es de 1 kilómetro y desde la parada de autobús es de unos 500 metros.