Las trampas de los supermercados para que pagues más sin darte cuenta

Pagar más por menos. Estas son las trampas de algunos supermercados para encarecer la cesta de la compra sin que el consumidor se entere. Pero los datos están ahí: el año pasado, según Nielsen, los españoles compraron menos productos de gran consumo (-0,7%), pero pagaron por ellos el 2,6% más. ¿Cómo es posible?

A pesar de que muchos ciudadanos ya comparan precios, tiran de promociones y optan, en muchos casos, por marcas de distribución, lo cierto es que los supermercados esconden varios ases en la manga para aumentar la facturación. Hay que andarse con ojo, porque una de sus estrategias pasa por bajar el gramaje de envases y productos –menos costes– sin reducir los precios. Ello implica también que pueden transportar más unidades –caben más en los palés y en las tiendas–.

Caprichos y platos preparados

Por otro lado, los supermercados están promoviendo los productos premium a modo de recompensa y capricho. En este apartado entran, por ejemplo, las cervezas de gama alta, patatas fritas de sabores, chocolate negro y yogur griego. Así, a la vez que los ciudadanos buscan ofertas y pagar menos por su compra, tienden a adquirir estos artículos especiales. Con todo, se recomienda comparar el precio por unidad de medida (kilo, litro…) para no caer en ninguna trampa.

Finalmente, los supermercados están aprovechando el poco tiempo de la sociedad actual para cocinar y están apostando por la comida preparada. Evidentemente, el precio medio de estos platos es superior al coste de cocinar en casa los mismos menús.