Existen fragancias, gustos y sensaciones capaces de despertar la nostalgia y transportarnos tres o cuatro décadas atrás en el tiempo. Y es probable que jamás vuelvas a ponerte un Drakis como colmillos o que vuelvas a estirar la infinita tira de un chicle Boomer. Si echas de menos algunas de las chucherías y golosinas que reinaban en la Cataluña de los años 80 y los 90, este es tu artículo.
Para saciar el apetito metafórico de tu nostalgia, desde Crónica Directo hemos elaborado una recopilación de bollería y chucherías que han quedado en el olvido. Es hora de sumergirse en un viaje retrospectivo y rememorar aquellas tardes de infancia compartiendo meriendas y bocados con amigos disfrutando de algunos de estos emblemáticos dulces.
Drakis
Estas patatitas además de poder ser consumidas permitían jugar a ser un vampiro. Aunque los Drakis ya no estén disponibles en el mercado, la marca Cheetos ha continuado con otros productos, como los Cheetos Pandilla. Sin embargo, éstos ya no permiten convertir el snack en una dentadura vampírica improvisada antes de zampársela.
Chicles Boomer
Posiblemente, el chicle que arrasaba hace décadas y que todo el mundo sueña con que vuelva. No solo podías comprarlos de forma individual, sino que podías pasar una buena tarde degustando sus tiras extensas en un montón de sabores diferentes.
Los Bucaneros
Los Bucaneros debutaron junto a otros 'bollitos' como los Bony, los Tigretón y la Pantera Rosa, aunque no lograron igualar su éxito. Así que estas delicatessen rellenas de crema acabaron desapareciendo.
Piruletas Lolipop
Las piruletas Lolipop poseían una textura suave, un icónico sabor a fresa y una particularidad: al llegar al palo este se deshacía al estar hecho de sabor de cartón.
Mi Merienda
Pocas cosas resultan más icónicas que el pan con chocolate para una merienda. Sin embargo, Bimbo revolucionó el concepto al lanzar una versión lista para llevar. La marca revivió este producto hace algunos años, pero la gran diferencia es que ahora la tableta de chocolate incluye Lacasitos.
Tulicrem
La desaparición de Tulicrem tanto en Cataluña como en el resto de España fue uno de los primeros Expediente X de nuestra infancia: ¿Por qué se esfumó si casi todos la tomábamos? Si inicias un debate sobre ello en Twitter, algunos estarán de acuerdo con que Tulicrem tenía un sabor especial, mientras que otros te dirán que tampoco era para tanto.
Tunos
Los anuncios de Tunos afirmaban que eran "2 pastelitos para 2", pero seamos sinceros: nadie compartía los Tunos. Te los comías todos. Años después la marca Martínez los introdujo en surtidos al peso, pero ya nada tienen que ver con los de nuestra infancia.
¿Cuál de todos estos productos desearías que no hubiera desaparecido nunca?