La ermita románica catalana situada en un entorno natural protegido y que es Patrimonio Mundial de la Unesco

Catalunya tiene muchos parajes asosmbrosos, desde casitas del bosque insospechadas a construcciones que son Patrimonio Mundial de la Humanidad.

En este caso, visitamos la vall de Boí, y en concreto, Durro. La buena conservación de las iglesias del valle y su perfecto encaje con el entorno natural (que también está protegido), hacen que la belleza del conjunto haya sido catalogada como Patrimonio Mundial de la Unesco, desde el año 2000.

Entorno románico de la Vall de Boí

Durro, uno de los pueblos catalanes que figuran entre los más bonitos de España LOS PUEBLOS MÁS BONITOS DE ESPAÑA

Hay un total de 9 iglesias románicas en la Vall de Boí, de las cuales la más grande es St Climent de Taüll. Todas las iglesias son del siglo XI y XII, y hay una en cada aldea del valle. Lo cual es inusual porque indica que es una zona que ha sido mantenida y protegida durante siglos. Su construcción en piedra, con muros muy gruesos y pequeñas ventanas, decoración austera y bonitos campanarios en torre corresponden al estilo románico lombardo, que vino de Italia.

Las pinturas que decoraban su interior también se conservan, aunque no en las iglesias sino el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), situado en Montjuïc.

Ermita de Sant Quirc de Durro, 3 estilos en uno

Ermita de Sant Quirc de Durro

La ermita de Sant Quirc de Durro, situada a una altitud de 1500 metros, en la montaña de Durro. Su emplazamiento no es aleatorio, sino que se trata de una marca territorial vinculada al espacio social trabajado para la comunidad y a la tradición de origen pagano de «correr fallas».

Otra de sus características principales es que conviven en ella distintos momentos históricos: la arquitectura románica, con un la imagen de Sant Quirc (o Quirce) y santa Julita de estilo gótico y un retablo barroco.

La iglesia se construyó en el S.XII, y entre los siglos XVII y XVIII se incorporó la bóveda de la nave y el campanario de espadaña. Esto es, en forma vertical, de punta y con huecos para las campanas. Se trata de un elemento típico de la arquitectura románica franciscana, ya que se alejaba de la ostentación de otros estilos de campanarios.

La ermita se quedó así hasta el año 1996, que se restauró y quedó como la vemos ahora.

Cómo llegar a Sant Quirc de Durro y entradas

Las iglesias de la Vall de Boí se pueden visitar en conjunto y existen distintos precios, en función de la cantidad de iglesias que incorporemos a la visita. Desde la web de Centre Romànic podemos encontrar packs para visitar 3 iglesias (7 € la entrada) y 5 iglesias (10 € la entrada). Además, se recomienda hacer la visita global del conjunto, con la entrada combinada que incluye una visita a las iglesias y también al MNAC, donde se pueden visitar los mencionados murales.

La ermita de Sant Quirc de Durro se encuentra en la provincia de Lleida, casi tocando a Francia, por lo que si nos decidimos a visitarla habrá que coger el coche. Exactamente 3 h y 40 minutos, según Google Maps, por la A-2 y después la N-230 hacia la Vall de Boí.