Las iglesias, además de ser lugares de culto, son edificaciones majestuosas en las que admirar una imponente obra arquitectónica de gran calibre. Actualmente, Cataluña cuenta con un total de más de 2.534 iglesias católicas y, concretamente, en Viladecans, en Barcelona, que es la ciudad protagonista de este artículo, tiene tres: la Ermita de Sales, la Parroquia de Sant Joan y la Iglesia de Santa María de Sales. Y de esta última es sobre la que hablaremos, a continuación.
La iglesia católica de Santa María de Sales fue construida en el año 1967 según el proyecto de Robert Kramreiter y destaca por sus raras formas arquitectónicas.
Una iglesia diferente
Esta iglesia tiene una estructura de hormigón que llama la atención por su diseño original. En lo que respecta a su campanario, se distingue por una curva pronunciada, que parte desde la nave principal de la iglesia, motivo por el cual es conocida como la iglesia del tobogán. En el interior, presenta una distribución en cuerpos irregulares cerrados con vidrieras policromadas que permiten una iluminación interior.
El edificio se inscribe en la corriente del brutalismo arquitectónico, caracterizado por el uso predominante de cemento al descubierto, aunque sus curvas evocan las construcciones de Le Corbusier, uno de los mentores de Kramreiter.
El campanario tiene una altura de 22.30 metros y alberga desde la década de 1980 cuatro campanas bautizadas con los nombres de Martina, María de Salas, Rosa y Mercedes. En su interior, destaca la presencia de vidrieras creadas por Luciano Navarro, que representan momentos de la pasión y resurrección de Jesús, incluyendo también la Ascensión y Pentecostés.
Además, este lugar ha sido reconocido como Bien de Interés Local por el Ayuntamiento de Viladecans.
El arquitecto
¿Quién es Robert Kramreiter? Fue un arquitecto austríaco (1905-1965) que se graduó junto a Peter Behrens. Empezó a trabajar en Düsseldorf, Berlín y Colonia en edificios industriales e iglesias. En 1933 se trasladó a Viena, donde se centró en las construcciones religiosas. En 1941 fijó su residencia en España, donde realizó proyectos para instituciones culturales alemanas como el Instituto Alemán de Cultura de Madrid. En Cataluña trabajó, además de en esta iglesia, en la fábrica Siemens de Cornellà de Llobregat. En 1950 regresó a Viena donde, además de construir más iglesias y escuelas, se encargó de la reforma de la embajada de España en Viena. En 1961 recibió la Orden al Mérito Civil Español.