Peratallada, un encantador pueblo medieval de la comarca del Baix Empordà, en la provincia catalana de Girona, destaca por la excelente preservación de su núcleo antiguo, cuyos orígenes se remontan al siglo XI.
Su nombre deriva del catalán antiguo y significa "piedra tallada", una clara alusión a los materiales empleados en la construcción de las viviendas y murallas locales. La configuración arquitectónica se basa en vías empedradas, edificaciones pétreas y un castillo fortificado en el corazón de la villa.
Qué ver en Peratallada
El castillo de Peratallada era el epicentro de la baronía perteneciente al linaje de los Peratallada, cuya genealogía se remonta al siglo XI. Si bien documentos autentifican su existencia ya en el año 1065, ciertas estructuras sugieren que pudo erigirse sobre una fortaleza aún más antigua. Sus murallas se elevan entre 4 y 5 metros respecto al terreno circundante. Sobre ellas se alza el esplendoroso palacio con su torre del Homenaje, de planta rectangular y coronada por almenas. Dispone de una entrada adintelada y un nivel intermedio de madera.
Después de dejarte deslumbrar por el castillo, otra visita obligada es la Iglesia de San Esteban. Es una construcción románica del siglo XIII que alberga el sepulcro del barón Gilabert de Cruilles y, en su punto más alto, tiene un campanario de cuatro arcos apuntados. Curiosamente, este templo religioso yace fuera del recinto amurallado.
Finalmente, la plaza de las Voltes es otro punto de interés. Allí se puede degustar platos con una rica historia en los distintos restaurantes y adquirir artículos artesanales en las tiendas locales.
Cuándo ir a Peratallada
Las festividades añaden un aliciente adicional, como las fiestas mayores, que se celebran en el primer fin de semana de agosto. Estas incluyen una cena popular en la plaza mayor, seguida de fiesta, espectáculos de gigantes y cabezudos, entretenimiento infantil, música y danzas tradicionales.
No obstante, Peratallada no se limita a esto, ya que también alberga un mercado medieval en el primer fin de semana de octubre. Durante estos días, la villa se anima con personas vestidas con atuendos de época. Hay diversas representaciones teatrales en las calles, desde la llegada de los monarcas al municipio hasta justas entre caballeros y banquetes reales con actuaciones de trovadores. Además, se ofrecen actividades interactivas como talleres infantiles de arte, cuentacuentos, tiro con arco, enseñanza de oficios históricos, paseos en burro y visitas a campamentos medievales para descubrir cómo era el día a día de los soldados.
Más allá de las arterias principales y las festividades populares, recomendamos explorar las calles empedradas de Peratallada, lo que brinda la oportunidad de descubrir rincones y plazas cargados de historia y belleza. El Portal de la Virgen, la Calle de la Roca, la Plaza del Oli y la calle Mayor son algunos de los pequeños espacios que vale la pena explorar para una experiencia integral.
Cómo llegar desde Girona
La opción más práctica para llegar a Peratallada desde Girona es, sin duda, ir en coche. El recorrido es bastante breve y se completa en unos 40 minutos aproximadamente, variando según las condiciones del tráfico. Recomendamos la ruta GI-660, ya que te llevará de manera directa hasta la localidad.