Sí, ya estamos en época de calçots. Y, sin duda, es uno de los alimentos más característicos de la gastronomía catalana. Estos brotes tiernos de cebolla, de variedades específicas, se han convertido en una tradición culinaria arraigada, especialmente de noviembre a abril.
Los meses de más actividad de esta rica tradición son enero, febrero y marzo. Sin embargo, desde Crónica Directo queremos recomendarte dónde puedes comer los mejores calçots de Tarragona.
Los mejores calçots de Tarragona
- Restaurante El Vinyet: La calçotada sabe mejor a la parrilla. La ambientación es única, ya que transporta al comensal a una masía antigua, con el techo de madera y las paredes de piedra. Además, está situado cerca de un castillo que invita a pasear y a recuperar la relación con la naturaleza.
- La Gran Calçotada de Valls: Este año será el domingo 28 de enero. Es una de las fiestas más conocidas de calçots que se celebra en este pueblo tarraconense. Podrás disfrutar de un evento de pasacalles, concursos, asado de calçots a la parrilla y degustaciones varias.
Según cuenta la leyenda, el calçot fue descubierto por un vallense, que fue el primero en cultivar los brotes tiernos de la cebolla que nacen de las cebollas viejas. Esto sucede si se deja una cebolla demasiado tiempo en la despensa de casa, ya que le crecen unas ramificaciones de color verde, es decir, los brotes. Y siguiendo con esta historia parece que este personaje histórico, también, fue el primero en acompañar los calçots con la tradicional salsa romesco.
- Cal Ganxo: Este restaurante, ofrece calçotadas desde 1980, y sigue ofreciendo productos de proximidad y con una salsa no tan secreta (en su página web explican que lleva almendras, ñoras, ajos, tomates, guindilla, aceite de oliva, aceite de girasol, perejil, vinagre y sal) que le da ese toque de sabor extra. Además, los sirven sobre papel de periódico, como manda la tradición.
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