El precio de la vivienda sigue por las nubes. Esta circunstancia provoca que cada vez sea más complicado poder encontrar un inmueble a un precio asequible, ya se trata de un piso o de una casa, un tipo de vivienda que a raíz de la pandemia creció en gran popularidad, pero que en los últimos meses ha encadenado un claro retroceso de operaciones.
Sin embargo, aún son muchas las personas que se encuentran interesadas en poder disfrutar de una casa alejada del bullicio y las molestias propias de las grandes ciudades, aunque ello suponga prescindir de los servicios que estas ofrecen. En esta ocasión te hablamos del pueblo de Cataluña donde un piso de 103 metros cuadrados te puede costar 45.000 euros.
Balsareny
El municipio más barato
Este se encuentra a pocos kilómetros de Barcelona, concretamente a 72 kilómetros, y se llama Balsareny, un pueblo encantador en el corazón de Cataluña. En él se puede disfrutar de una belleza natural, ideal para quienes quieren disfrutar de una escapada, pero también para vivir, sobre todo si se teletrabaja.
Además del encanto de este municipio, hay que destacar la gran accesibilidad que ofrece para poder comprar una vivienda, ya que el precio del metro cuadrado es el más bajo de toda la provincia de Barcelona. Si la media de la zona es de 2.647 €/m2, en Balsareny es mucho menos de la mitad, 776 €/m2.
Entorno
De esta forma, Balsareny es un lugar perfecto para poder comprar un inmueble económico, aunque el precio final varía en función del estado de la casa y la propia ubicación de esta, tal y como sucede en cualquier otro lugar.
Situado en un entorno natural excepcional, es un pueblo económico en el que disfrutar de una increíble belleza natural, en un terreno ondulado atravesado por el río Llobregat y rodeado de pino blanco, siendo su principal vía de comunicación el eje del Llobregat.
El río Llobregat
Encantos
A ello hay que sumar su increíble arquitectura, desde las iglesias de Santa María y San Ramón de Sobirana de Ferrans, al legado de colonias textiles y el fortín del Maurici, que ofrece impresionantes vistas del municipio. Eso sin contar con el castillo que preside la colina en la que se encuentra.
Comprar una vivienda en este pueblo no solo supone un importante ahorro financiero con respecto a la compra en otros municipios catalanes, sino que permite dejar atrás la agitada vida de la ciudad, así como el aire contaminado y el estrés, contribuyendo a disfrutar de una mayor relajación, salud y calidad de vida.
Castillo de Balsareny
Comprar una casa es uno de los sueños más recurrentes entre los españoles, pero desgraciadamente para muchos es muy complicado. El precio de la vivienda ha ido subiendo, lo que sumado a unas hipotecas más caras hacen que cada vez haya que hacer un mayor desembolso económico.
No obstante, el mercado inmobiliario no es uniforme en todo el país y el precio de la vivienda varía notablemente en función de distintos factores, como sus características o el propio lugar en el que se encuentre. De esta manera, podemos encontrar oportunidades como las que ofrece Balsareny u otros municipios catalanes que son los más económicos para comprar una casa.
Según los datos de Idealista, Balsareny es el municipio donde el metro cuadrado es más barato de la provincia de Barcelona. A este le siguen, Gironella y Manlleu, donde los precios se sitúan en 910 y 968 euros, respectivamente. Por debajo de los 1.000 euros ya solo que Berga, con el metro cuadrado a 976 euros.