No forma parte de la Cataluña vaciada, es directamente un pueblo abandonado. Oculto en las tierras de Tarragona hay un lugar que brilla por sus ruinas románicas, su castillo y su iglesia. Una joya que el tiempo y el ser humano han dejado perder, pero que, como buen fantasma, se resiste a desaparecer.
Montgons es o era un pequeño pueblo medieval con una historia rica y un pasado olvidado. Este deshabitado poblado, documentado desde 1149, ha caído en el olvido a lo largo de los siglos, dejando tras de sí un intrigante rastro de ruinas, incluyendo un castillo y una iglesia románica que se resisten a desaparecer por completo.
Primeros registros
Durante los primeros años de su existencia, Montgons estuvo en manos de la familia Timor, que mantuvo su señorío sobre el pueblo hasta el siglo XIII. A finales del siglo XIV, pasó a formar parte del arzobispado de Tarragona.
Pasaron varios siglos hasta que empezó el despoblamiento del municipio. Comenzó en el siglo XVI, y desde entonces el pueblo ha quedado prácticamente abandonado.
El castillo
De aquellos polvos quedan estas ruinas. Los vestigios del castillo de Montgons, situado en lo alto de una colina, son un recordatorio tangible de su pasado medieval. Aunque gran parte del castillo ha caído en ruina, una de sus fachadas ha sobrevivido al paso del tiempo.
Esta edificación de defensa cuenta con tramos de muros construidos con piedras sin trabajar y otros con un patrón más irregular, lo que refleja su historia y evolución a lo largo de los años.
La iglesia románica
Cerca del castillo, se pueden encontrar las ruinas de viviendas medievales, algunas excavadas en la roca, aunque lamentablemente muchas de ellas están invadidas por la vegetación, lo que dificulta su conservación.
La iglesia de Sant Julià de Montgons, una antigua parroquia del pueblo, es otro elemento destacado de este lugar olvidado. La iglesia data de los siglos X y principios del XIII y se encuentra cerca de los restos del castillo.
Detalles arquitectónicos
A pesar de su pasado religioso, la iglesia ha sufrido daños significativos y en algún momento parece haber sido utilizada como vivienda. La capilla de Sant Julià de Montgons presenta una sola nave y cuenta con elementos arquitectónicos de estilo románico que atestiguan su antigua grandeza.
En un estado de abandono lamentable, el municipio alberga un pasado medieval en ruinas que pide a gritos ser rescatado de la oscuridad. A escasos kilómetros de Tarragona, este pueblo fantasma sigue siendo un misterio para muchos, pero con un acceso relativamente sencillo, es un tesoro histórico y arqueológico que merece ser explorado y preservado.
Cuevas cercanas
Además, a pocos kilómetros del pueblo, las Coves dels Montgons ofrecen una experiencia intrigante. Dos cavidades adyacentes, unidas por una galería artificial, permiten a los visitantes explorar un entorno subterráneo fascinante. Estas cavidades, con aproximadamente 10 metros de fachada y dos metros de profundidad, proporcionan una visión única de la geología de la zona y de la vida en la antigüedad.
Montgons, el pueblo fantasma de Cataluña, es un lugar con un rico pasado que merece ser descubierto y protegido para las generaciones futuras. Aunque su historia está marcada por el abandono y la decadencia, su valor como ventana al pasado medieval de la región es innegable. Un legado que merece ser reivindicado, recuperado antes de que su historia se desvanezca por completo en el olvido.