No todo se puede traducir. Los mismos españoles tratamos de buscar expresiones o palabras en otros idiomas cuando viajamos y resulta imposible. Estas cosas también les pasan a muchos catalanes, que intentan castellanizar algunos vocablos y no les sale. El español no tiene esta palabra en su diccionario.
Esta es una prueba más de la importancia de los matices que puede aportar el lenguaje y cómo nos cambia la mentalidad, aunque no nos demos cuenta.
Potencialidades del idioma
Existen términos que pueden trasladarse directamente de un idioma a otro sin requerir más explicaciones, mientras que hay otros que brindan perspectivas frescas, expandiendo nuestra percepción y comprensión de la realidad.
Pero, como decíamos, hoy nos queremos centrar en palabras catalanas que aún no tienen traducción literal al español, y que deberían tenerlo porque son auténticas joyas lingüísticas que dicen mucho con muy poco.
Ocho palabras intraducibles
Somiatruites: Si tuviéramos que traducirlo de forma directa, sería "sueñatortillas". Se refiere a alguien ingenuo o que sueña con utopías.
Apa: Más que un término, "apa" es una exclamación. Podría compararse con un "vamos" o un "hala". Sirve para acentuar o introducir lo que sigue. ¡Vamos, chico: con más brío!
Seny. "Seny" "Seny" en catalán alude a un juicio o prudencia, una especie de buen criterio al actuar. Es lo opuesto a una respuesta instintiva o fruto de las emociones.
Rauxa: Si "seny" se refiere a un tipo de prudencia, "rauxa" es todo lo opuesto: es actuar de manera espontánea o impulsiva, sin lógica. A lo loco.
Bocamoll: En español sería similar a un "hablador". Es quien no se puede contener y dice lo que quizás sería mejor guardar.
Llufa: Este término podría interpretarse como un aire fétido, pero eso no capturaría el matiz con el que se presenta. Una llufa no solo es un gas desagradable al olfato, sino que además se libera en silencio. Un escape inesperado, por decirlo de alguna manera. Un pedete sutil. Un pedete que huele en catalán.
Merder: Un "merder" es un espacio lleno de desorden, aunque comúnmente se podría entender como caos, alboroto o jaleo pero a unos niveles que llegan casi a lo escatológico.
Petonet: Esta palabra es una rara avis, por así decirlo. Se puede traducir perfectamente como "besito", pero hay algo en la sonoridad de esta palabra en catalán que emula de una forma tan perfecta el de un besín... Es una pena que dicha sonoridad no se adapte bien en su versión española.
Plegar: Y para concluir, qué mejor palabra que esta, tan arraigada en los diálogos en español que se llevan a cabo en Cataluña que ni nos damos cuenta de su origen catalán. "Plegar" puede referirse a terminar un día de trabajo o una actividad específica, pero también significa renunciar o dimitir.
¿Has descubierto alguna palabra nueva en catalán que te atraiga? ¿O las conocías todas?