¡Noches de desenfreno, mañanas de ibuprofeno! Si tienes una cierta edad y eras fan del ocio nocturno, seguro que te acuerdas de esta mítica discoteca que llenó miles de tus fines de semana y fue clave en tu juventud alegrando tus noches. ¿Te acuerdas de esta discoteca que dejó una imborrable huella en nuestra memoria?
Si eres de Tarragona o de las inmediaciones, ¿quién no recuerda la discoteca Louie Vega? Se encuentra en Calafell y abrió sus puertas en el 1988 hasta su cierre en el 2012. El espacio fue un punto neurálgico de las noches de la Costa Daurada; obra de Alfred Arribas fue reconocida arquitectónicamente por su diseño e interior con un premio FAD y se catalogó como Bien Cultural de Interés Local por su singularidad.
Un poco de historia
En su fachada destaca la mítica avioneta incrustada, en homenaje a una que se estrelló durante la Guerra Civil española, que había caído en las proximidades, y llevaba por nombre Louie Vega.
En el 2008 el local comenzaba a notar los efectos de la crisis, por eso cerró en el 2010 y luego reabrió para volver a cerrar en el 2012.
En el 2016, la propiedad tapió sus entradas para poder evitar saqueos u ocupas. Gracias a su catalogación se han conservado algunos elementos, cosa que hace que no se pueda derruir.
¿Qué pasara finalmente con ella?
Actualmente, toda la discoteca es de propiedad municipal y se destinará a equipamientos que están por determinarse. La operación asciende a 1,6 millones de euros que ha permitido al consistorio hacerse con el terreno que ofrece por su ubicación y superficie. Los propietarios acumulaban una deuda con el Ayuntamiento similar al coste de la operación, por eso la deuda ha quedado saldada y el Ayuntamiento ha logrado patrimonio. Por tanto, se eliminará el proyecto inicial previsto de construir 120 viviendas y un espacio comercial y se conservará la antigua discoteca gracias a su catalogación.