La magia de Disney celebra 30 años con su espectáculo sobre hielo

La magia de Disney es eterna y sigue conquistando a pequeños y adultos con el paso de los años. El espectáculo familiar Disney on ice llega a Barcelona este jueves 16 de febrero en la celebración de su 30 aniversario en España para entretener a toda la familia con acrobacias y un show visual. Los principales personajes de Disney patinarán sobre una pista de hielo de más de 600 metros cuadrados situada la pista del Palau Sant Jordi con un total de siete funciones hasta el próximo domingo 19 de febrero. 

La producción internacional cuenta con un equipo de más de 80 personas de 11 nacionalidades diferentes que regresan tras dos años de pausa por la pandemia. Con cada edición, la función se va actualizando para dar paso a los nuevos personajes que la factoría va sumando con sus películas. En esta ocasión, Miguel, el niño de Coco, una de las películas más exitosas de los últimos años de Pixar Animation Studios, se une al reparto.

30 aniversario

"Celebramos el 30 aniversario. Arrancamos en el 93 y para mí es muy especial porque fui a verlo con ocho años cuando lo organizaba mi padre y ahora llevo a mi hijo. Es un poco la tónica de todo el mundo, las segundas y terceras generaciones. Después de tres años de pandemia da más alegría para todos volver", explica Nicolás Renna, director de Proactiv, en declaraciones a Crónica Directo.

Un show en el que tienen cabida niños y adultos: "Decimos que es un espectáculo para niños de todas las edades". "Con la excusa de traer a un niño vienen adultos. Se divierten todos con La Bella y la bestia o Aladdín, y los más nuevos con otras como Frozen", expone el directivo. Una función en constante desarrolllo: "No pueden faltar Mickey y Minnie, pero la tecnología es lo que hace que puedas hacer cosas más espectaculares, cambios de vestuario más rápidos y trucos mejores".

Historias transversales

Renna ha hecho balance de lo que significará su paso por la capital catalana y ha asegurado que superarán "las 50.000 personas en cuatro días" ya que "Barcelona es una ciudad que acoge muy bien a los espectáculos familiares". "Mantener la magia de Disney es nuestro objetivo", manifiesta.

"Las historias de Disney son transversales, cruzan generaciones, clases y razas, y eso es lo que pasa con esto. Hace 30 años era Peter Pan y ahora es Frozen. Es un espectáculo muy vivo, muy rápido, hace que te metas en la historia. El hielo te da esa velocidad que no te da el teatro y puedes meterte en historias más complejas", considera el profesional del sector del entretenimiento.

Acrobacias y tecnología

Las acrobacias serán las protagonistas de este espectáculo, así como la incorporación de las últimas tecnologías y la proyección de imágenes caleidoscópicas. Un montaje en el que personajes como Mickey Mouse, Woody, Vaiana, La Sirenita, Aladdín, Campanilla y Buzz Lightyear, entre otros, vestirán más de 170 atuendos confeccionados por un centenar de sastres artesanos. Trajes que contarán con elementos como cristales de Swarovski insertados a mano.

Un espectáculo de grandes cifras que requiere mucha preparación. En concreto, se necesitan más de 15 camiones para transportar los elementos de la producción, cinco autobuses para los desplazamientos de los actores y más de 30 horas de trabajo para montar el escenario de hielo de 19 metros de ancho por 35 de largo. El Disney on ice ya suma más de cuatro millones de espectadores en sus giras y vende más de 500.000 entradas al año. 

Vuelta a la infancia

"El espectáculo te lleva a la infancia y a ser niño, te remonta a esas historias y formar parte de esto es un sueño hecho realidad", apunta el patinador Eddie González. "Practicamos constantemente para que todo esté en perfectas condiciones para el show. Tenemos clases de patinaje todos los días y área de entrenamiento en los camerinos. Las dos horas de espectáculo llevan años de entrenamiento", explica sobre el desarrollo de la representación.

Una experiencia que el acróbata define como "muy linda" porque "brinda alegrías a los niños y los adultos". "Los niños lloran de alegría al ver a los personajes. Esa experiencia es recíproca, la llevas también en ti. Aunque tengas un día malo, te olvidas de todo viendo la felicidad que le das a las otras personas", declara el gimnasta. "Los adultos vuelven a su infancia y se olvidan de sus problemas. No importa la edad, siempre vas a ser un niño con Disney", zanja González.