Ya está aquí el primer robot camarero de España

Hay un gran número de trabajos donde la mano de obra ha sido sustituida por el trabajo mecanizado. Es el caso, por ejemplo, de la industria del automóvil donde robots dirigidos por un ordenador realizan las tareas de montaje, facilitando así la producción en cadena.

En otras ocasiones, el trabajo de los robots no sustituye al hombre sino que lo complementa para favorecer su rapidez. Esta es precisamente la función de Cacahuete, un androide procedente de China y destinado en un restaurante español. Su tarea primordial es facilitar el traslado de la comida desde la cocina hasta la mesa. Muchísimos clientes han quedado impresionados con el preciso trabajo del robot.

El futuro también ha llegado a la hostelería

Cacahuete tiene una altura de 1’20 metros, y puede cargar hasta 30 kilos de peso. Su láser, incorporado en la parte inferior de la estructura, permite al androide medir las distancias entre las mesas para así saber dónde está el destinatario de la comida. En el mes que lleva trabajando ya ha dejado frases célebres como, “mi amor, sírvase su menú” o “tengo que seguir trabajando, si no me echarán del trabajo”.

Alonso Zhan, Gerente del Amazonia Chic y restaurante donde desempeña sus funciones Cacahuete, ha dejado claro que no piensa despedir a ninguno de sus camareros. El trabajo del robot es una ayuda para los camareros, ya que así estos pueden estar más pendientes de las necesidades del cliente. Aparte de su trabajo, Cacahuete también sirve como reclamo publicitario y así atraer a más gente.

Evolución importada de China

A parte de su trabajo, Cacahuete también sirve como reclamo publicitario y así atraer a más gente. Este mismo gerente afirmaba que los robots estarán ayudando a los humanos en otros puestos de trabajo, en un futuro próximo.

En Pekín, ya existe un restaurante completamente automatizado, donde los robots también se han hecho con el control de la cocina. Una evolución que puede modificar la forma de servir al público, dentro del sector de la hostelería. Por lo pronto, Cacahuete ya ha dado el primer paso.