Solo aptos para valientes: los pimientos más picantes del mundo
Su grado de picor se mide en una escala creada por el químico Wilbur Scoville en el año 1912
30 junio, 2021 00:00Los hay atrevidos y verdaderos valientes en la gastronomía. Y no para probar platos nuevos, sino intrépidos de los sabores como el picante. Eso es lo que ocurre con los pimientos más canallas de todo el recetario, y cuya fuerza se mide en una escala atribuida al químico Wilbur Scoville en 1912. Este baremo se basa en la cantidad de un componente, la capsaicina, que tiene cada una de estas variedades vegetales.
Y aunque parecen pimientos de lo más inofensivos, lo cierto es que en algunas ocasiones es tal el picor que causan que incluso deben manipularse con guantes. Tocarse los ojos con la mano después de hacer lo propio con la hortaliza puede derivar en los casos más graves en una irritación ocular dolorosa. Por no hablar de que el picante, cuando llega a la boca, es capaz de estimular los receptores del dolor, activar el sistema nervioso o provocar acidez estomacal, entre otros efectos secundarios.
Puro fuego en la boca
Esto es lo que uno puede sentir si prueba un trozo del pimiento más picante del mundo, el conocido como Carolina Reaper, y que en la escala antes mencionada contiene más de dos millones de unidades Scoville. Los que no pican estarían en un grado cero del medidor universal, mientras que la capsaicina en estado puro alcanzaría las 16 millones de unidades. Casi nada.
No es necesario llegar a esa cifra dolorosa en lo que al gusto se refiere. Esta variedad es el rey de los reyes de los pimientos picantes y, a la vez, comestibles. Nace de cruzar otros dos que no resultan para nada inofensivos: el Red Habanero y el Naga Pakistaní. Para los que ya lo han probado, aunque sea un trozo pequeño, dicen del Carolina Reaper que tiene un sabor delicioso a pensar de su incendiario interior.
Los siguientes en la lista
Supera también los dos millones de unidades el conocido como Trinidad Moruga Scorpion, un nombre que por sí solo ya da miedo. Ha sido descubierto hace relativamente poco, y ya se ha colado en este particular podio. Si el picor que se siente al morderlo queda en un segundo plano (algo complicado, por otra parte), uno puede notar ciertos matices afrutados y dulces. Así lo indican las notas de catas que los paladares más hechos al picante han realizado.
A continuación, se encuentran los pimientos 7 pot Douglah y 7 pot Primo. El primero de ellos es un tipo de chile del que dicen tiene un buen sabor cuando se consume tanto en la variedad fresca como en polvo. Su característica más destacable es que son de color verde cuando empiezan a crecer y se tornan oscuros en la maduración. En el caso del 7 pot Primo, su apariencia es larga y fina, por lo que se puede reconocer de forma sencilla. Eso sí, se trata de una semilla difícil de conseguir, ya que su producción mundial es limitada.
Cierre del 'top ten'
No por estar más abajo en el top ten de los pimientos más picantes significa que sean aptos para todos los paladares. Todo lo contrario. En este ranking merecen también una mención especial otras variedades como el Trinidad Scorpion Butch T, con una forma muy parecida al aguijón de un escorpión; el Naga Viper, cultivado en Estados Unidos; el Bhut Jolokia, que es algo así como 400 veces más picante que el tabasco; o el 7 pot Barrackpore, reconocible por una textura arrugada y oriundo de la isla de Trinidad y Tobago.
Algo menos de gradación, pero esa misma sensación de ardor en la boca, es lo que se siente con los dos últimos de la lista. Es el caso de 7 pot Red Gigante y del Habanero Savina rojo. Este último es mucho más conocido. Se trata de un chile de dimensiones muy reducidas (apenas mide tres centímetros) y de un tono intenso.
Calmar el picor
No es recomendable que una persona se meta un pimiento de los que aparece en la lista entero en la boca. Se cultivan para ser condimentos, que ya tienen unos efectos para muchos demasiado fuertes para disfrutar de una comida. Si este es su caso, se prescribe de forma encarecida evitar tomar un vaso de agua para calmar la sensación de ardor. Aunque pueda parecer lógico, solo se conseguirá potenciar en ciertos momentos el problema. Lo mejor es un trago de una bebida que lleve caseína como puede ser la leche o la cerveza sin alcohol.
Otro de los remedios caseros que pueden aliviar un picor insoportable es echar mano de alimentos con almidón, que se encuentra en el arroz, la patata o el pan; decantarse por las frutas cítricas, como un zumo de limón o de piña natural; o bien elegir entre un buen puñado de nueces o un par de onzas, si es más que suficiente, de chocolate con leche o chocolate blanco. Todos ellos, maridajes habituales de alimentos picantes por el contraste que ofrecen.