La inteligencia artificial no es ningún milagro. Sin embargo, sí es una tecnología que puede ayudar, y mucho, en tiempos de incertidumbre y de crisis como el que vivimos en la actualidad con la pandemia del Covid-19.
Ramón Trías, pionero en el desarrollo de aplicaciones de inteligencia artificial en España, lo tiene muy claro y le ve a la AI muchas ventajas para no sólo prevenir el avance del coronavirus, sino también aligerar el colapso sanitario.
Vacunas y tratamientos
Según la consultora AIS Group, la inteligencia artificial puede ayudar a predecir el avance de la pandemia, así como localizar grupos de la población más sensibles al contagio; simular escenarios y programar alertas; elaborar planes de contingencia; facilitar la clasificación de pacientes; homogeneizar criterios o dar apoyo en la creación de vacunas y tratamientos.
España supera ya en número de muertos por coronavirus a China. “Integrar la IA para analizar los datos puede contribuir a aligerar el colapso sanitario mejorando la eficiencia, la productividad, la exactitud y, por tanto, la toma de decisiones de alto nivel en aspectos tanto a largo como a corto plazo”, subraya Trías.
Mapas de evolución
Algunas compañías dedicadas a la inteligencia artificial ya han subrayado estos días la importancia de poder crear mapas de evolución para medir, así, las medidas que se están tomando durante esta crisis sanitaria. “Estos modelos dan respuesta a cómo puede avanzar el volumen de contagios si no hay confinamiento de ningún tipo; si hay unas ciertas restricciones de movilidad, o si hay un confinamiento total de la población; qué repercusión pueden tener esas medidas en la previsión de camas de UCI ocupadas, o de uso de respiradores, stock de retrovirales y material médico necesario”, matiza Trías
Así, AIS Group ha creado un paquete de indicadores que considera pueden ser susceptibles de tener incidencia en la gestión del coronavirus. Entre ellos está la localización a nivel de sección censal de grupos poblacionales como los mayores de 65 años que viven solos, los hogares que gastan en servicios de atención a dependientes a domicilio o la tasa de población mayor en riesgo de pobreza. "Hemos querido poner nuestro granito de arena para ayudar en tareas como la localización de la población más vulnerable”, concluye Trías.