Repaso de los mejores capítulos de ‘Friends’ en su 25 aniversario

El 22 de septiembre de 1994 la cadena de televisión estadounidense NBC emitió el primer capítulo de Friends. Una comedia de situación que duraría diez temporadas y que convertiría a un grupo de amigos en el más popular de las series de televisión de todos los tiempos.

Así lo ha reconocido la revista de entretenimiento estadounidense The Hollywood Reporter. Para esta publicación, Friends es la mejor serie de la historia. Una sitcom que está de aniversario en este 2019. Son ya 25 años de una historia atemporal que habla de la amistad, del amor y de la madurez durante la veintena y parte de la treintena.

Cuatro grandes capítulos

A pesar de lo que ha cambiado la sociedad desde que se rodaran y emitieran sus diez temporadas con las idas y venidas de Chandler Bing, Monica Geller, Ross Geller, Rachel Green, Phoebe Buffet y Joey Tribbiani, Friends continúa siendo una serie de culto para muchos de sus antiguos fanes y para aquellos que la descubren por primera vez.

Qué mejor homenaje para aquellos amigos de Manhattan (Nueva York) que un repaso a los mejores capítulos de Friends.

‘Unagi’

El del unagi. En el episodio 17 de la sexta temporada el paleontólogo y amante de los matrimonios, Ross Geller, da (o eso intenta) una lección a su amiga Phoebe Buffet y a su exnovia Rachel Green sobre la mentalidad oriental de alerta permanente. Unagi lo llama él.

Las chicas han decidido tomar clases de defensa personal para prepararse ante posibles ataques inesperados de delincuentes. El capítulo pasa entre susto y susto. Los de Ross a sus amigas y los de sus amigas a Ross. Todo esto con la constante insistencia de él en repetir unagi y en llevarse los dedos a la sien.

Toda la ropa

El de cuando nadie está listo. El episodio 2 de la tercera temporada contiene una de las escenas más memorables de Friends: la de Joey Tribbiani ataviado con toda la ropa de su compañero de piso Chendler Bing. Y, por si esto fuera poco, Joey decide que es el mejor momento para hacer algo de ejercicio.

Mientras tanto, Ross se desespera porque no van a llegar puntuales a la gala benéfica organizada por el museo en el que trabaja, Rachel no sabe qué ponerse y Phoebe se pone un adorno de Navidad en el vestido para disimular la mancha que se acaba de hacer.

Su langosta

El del vídeo del baile del instituto. En el episodio 14 de la segunda temporada llega uno de los momentos más esperados por los seguidores de Friends y uno de los más recordados: el beso entre Ross y Rachel. Y todo gracias a un vídeo casero grabado por el padre de Ross y Monica el día del baile del instituto de Monica y Rachel.

En él se puede ver a un joven Ross con el pelo al estilo afroamericano, a Monica con bastantes kilos de más y a Rachel con la nariz sin operar. La cinta deja claro que Ross siente algo por Rachel desde hace mucho tiempo atrás, a lo que Rachel responde besándolo. Phoebe dice una de las frases más famosas de los diálogos de toda la serie: “Él es su langosta”.

La carta

El de la playa. En el episodio 1 de la cuarta temporada ocurren muchas cosas que han pasado a los anales de la historia de Friends. El grupo de amigos se desplaza hasta la playa en la búsqueda de las raíces familiares de Phoebe. Acaban en una casa próxima a la costa cuyo suelo es de arena de playa.

Tras la ruptura amorosa con Rachel, Ross intenta rehacer su vida con una nueva pareja. Rachel no lo lleva bien y convence a la nueva novia de Ross para que se rape el pelo, lo que motiva un nuevo acercamiento entre ambos, que se salda con una extensa carta (18 folios por las dos caras) en la que Rachel le pide a Ross que asuma toda la responsabilidad de la ruptura.

El descanso

Él se duerme mientras la lee y confirma a Rachel todo lo que dice la carta. Una vuelta de la pareja que se salda en ese mismo episodio cuando Ross descubre que ha asumido esa responsabilidad y se despide con la frase, más que repetida por él, de: “¡Estábamos tomándonos un descanso!”.

Mientras tanto, Phoebe descubre que quien ella creía que era su madre natural en realidad no lo es; Monica sufre la picadura de una medusa y Chendler la orina encima para aliviar su dolor, algo que avergüenza, y mucho, a sus protagonistas.