El secreto del éxito de Rosalía: funcionar como una empresa

Son los secretos del éxito de Rosalía, la cantante catalana de trap, flamenco y fusión urbana que está en boca de todos y no cesa de recoger premios y distinciones. Rosalía Vila Tobella funciona como una empresa y utiliza la estrategias de las firmas start up para asaltar el estrellato de la canción y mantener en vilo a su ya amplísima base de fans: no en vano, la de Sant Esteve Sesrovires cuenta con 1,4 millones de seguidores en Instagram.

Según ha avanzado Expansión, la artista catalana sigue una estrategia que la asemeja a los jóvenes emprendedores que ponen en marcha negocios y logran el éxito. Con ello y tras conseguir, por ejemplo, dos premios Grammy latinos, triunfar en los MTV Europe Music Awards y arrasar en los Premios Goya, la vocalista catalana se fija ahora como reto consolidarse en el estrellato.

Innovación flamenca

Una de las características que podría explicar su éxito es la capacidad innovativa de la cantante. La gran baza de su música ha sido innovación del estilo flamenco clásico mediante su fusión con estilos de música que ha encandilado a las nuevas generaciones como es el trap.

Si se realiza una comparativa con las start ups, la aparición de este flamenco-trap puede considerarse un paralelismo con la introducción de nuevas facilidades en modelos de negocio tradicionales. Es decir, una actualización de los servicios, igual que Rosalía ha acutalizado el estilo musical con una propuesta que ninguna de las dos tendencias ha podido ofrecer por sí sola.

Visión empresarial

Otro de los rasgos que destacan de Rosalía es su "mentalidad empresarial", tal como lo ha calificado Judit Català, consejera delegada de la agencia de marketing XL Yourself para el diario Expansión. La directiva asegura que además de la actitud "emprendedora" de la cantante, se puede relacionar su éxito con el de una start up "porque ha utilizado técnicas de marketing y promoción propias de este tipo de empresas”.

La artista Rosalía en plena actuación / EFE

La artista Rosalía en plena actuación / EFE

La diferenciación entre la inmensa competencia en el mundo de la música es un elemento que la enmarca en la premisa que señala Català. Es indiscutible que su estilo dista de todo lo conocido hasta el momento y no solo en lo musical: también en la lírica (con su "tra-trá"), el estilismo, la puesta en escena de sus actuaciones y sus videoclips. 

Promoción diferencial

Su ultimo disco, El mal querer, también se enmarca en esta filosofía del rasgo diferencial sobre los demás. Está basado en una novela occitana en la que una joven maltratada consigue apartarse de él y ser libre. Así, cada una de las canciones es una especie de capítulo en esta historia, lo que consigue un atractivo más para el CD en su conjunto y no únicamente llame la atención para escucharlo a través de canciones sueltas. 

Esto es lo que en marketing se conoce como venta adicional: aquella que se consigue al ofrecer al cliente un producto relacionado con el que realmente quiere comprar, en el último momento de la transacción, para hacer crecer su ticket. En el caso de Rosalía, la idea es que las canciones creen en el que las escucha un engagement para conocer el resto de la historia, es decir, que les "enganche" como si de una novela se tratara.

Contenido gratis y dosificado

Un aspecto que ha ayudado a que el éxito de las canciones de la artista catalana tuviera una difusión y un recorrido amplio en el tiempo es la forma en la que se ha dado a conocer su creación. Las grabaciones se han ido filtrando poco a poco al público en lugar de todo a la vez, como se hace tradicionalmente al grabar cada nuevo álbum.

Además, la gran mayoría están disponibles de forma gratuita (algunos son de pago) en las plataformas de música de Youtube y Spotify, lo que permite llegar a un público mucho más amplio. Una estrategia empresarial que ofrecen muchos negocios tecnológicos de nueva creación, que ponen a disposición del usuario sus apps gratuitas, aunque también ofrecen servicios premium para aquellas personas que quieran pagarlos.