La gastronomía es una de las modas de la actualidad y una de las más seguidas en el siglo XXI. ¿Podemos también definirla como arte? Obvio que sí porque juega un papel reivindicativo en la sociedad.
El Museu del Disseny de Barcelona --junto a la Plaça de les Glòries Catalanes-- acoge desde el pasado miércoles una completa exposición, que ha viajado por más de una decena de países, y que el próximo 21 de mayo pondrá punto y final a esta aventura.
En la muestra, los visitantes tienen la oportunidad de sentirse como si reservaran mesa en El Bulli, El Celler de Can Roca, Arzak o en el Quique Dacosta, aunque sin gastarse un duro. Y con un protagonista muy spanish, las tapas.
Comer con la vista
Además de manifestar la cultura del comer, la obra también recoge una importante colección de objetos relacionados con la cocina española clásica. Muchos de los miles de visitantes han comprobado que la Minipimer o la exprimidora Braun fueron inventadas en Cataluña. Una forma de pasear la cultura culinaria made in Spain por el mundo, y que tanto atrae a los extranjeros.
El padre de Tapas. Spanish Design for Food es el arquitecto Juli Capella. Una persona capaz de poner en sintonía un plato de jamón con una decoración impoluta, pero a la vez extravagante y transgresora --como un desayuno en un futbolín--. Él prefiere llamarlo “cocina tecnoemocional”, una especialidad que mestiza ciencia y habilidad culinaria.
Detalle de Tapas Spanish Food Design
Reliquias y Best Seller
La exposición posee más de 270 productos, entre los que se pueden encontrar platos de los mejores restaurantes con estrella Michelin del país.
Pero, ¿cómo consigue Capella estos productos? El comisario cuenta a Crónica Global que detrás de esta muestra “hay un trabajo infinito”. “Hay muchos productos que se encuentran en las tiendas --best seller--, otros que han sido aportados por diseñadores, otros que son prototipos y que nunca habían salido a la luz, y finalmente hay reliquias y piezas fetiche”.
La historia ha llevado a que las teorías del buen comer lleguen a toda la ciudadanía. Antes solo unos pocos podían disfrutar de este privilegio, pero la alimentación “se ha sofisticado” porque ahora llega a “la clase media, que antes tenía un papel más restringido en este placer”, indica Capella.
En principio, la exposición se preparó para hacer mella en ciudades no españolas, por ello se ofrece el título en inglés. “Queríamos mostrar en Miami y Tokio nuestra cultura gastronómica desde otra órbita”. Pero el valor sentimental jugó un papel determinante en el corazón de Capella para cerrar las puertas en Barcelona. “Era lo lógico, y finalmente lo que queríamos”, sentencia.
“Un museo no es un Corte Inglés”
En cuanto a los datos de asistencia, el comisario es muy claro: “No me interesan para nada, esto no es un Corte Inglés”, en alusión a que “los productos se encuentran en el lugar que están por algún motivo”.
El arquitecto barcelonés pretende que con su visita, los asistentes disfruten, se diviertan y reflexionen. “Mi objetivo es que sea transformadora y que haga pensar”. Pero añade entre risas que "cuantos más vengan, mejor".
La muestra también está acompañada por un libro-catálogo, editado por Acción Cultural Española, con prólogo de Ferrán Adrià, y con un texto del periodista y crítico gastronómico Pau Arenós. El ejemplar cuenta con más de 600 ilustraciones en la que se detallan todos los productos que se pueden palpar en el museo.
Una degustación transversal
Tapas pretende ser una degustación, una mirada transversal que incluye ámbitos variados de la interacción entre el diseño y los ágapes. La exposición busca fundamentarse en tres espacios temáticos: la cocina --como laboratorio--, la mesa --el universo de objetos para la degustación--, y por último la comida --donde se encuentra el diseño vanguardista de los alimentos--.
La muestra exhibe diferentes vitrinas con objetos minuciosamente seleccionados, con la voluntad de expresar la variedad de estilos y procedencias.
Además, contará con la presencia de ilustres cocineros como Ferrán Adrià y Jordi Roca, que acompañados por arquitectos de reconocido prestigio como Huber o Andreu Carulla ofrecerán conferencias y presentaran sus últimas creaciones.