Contratas e Infraestructuras se va a pique
Esta compañía entra en quiebra medio año después del desplome de su accionista Prasa
27 febrero, 2020 00:00Contratas e Infraestructuras sigue el camino de su matriz y también se declara en concurso de acreedores. El Juzgado Mercantil número 1 de Córdoba ha dictado un auto por el que dispone la suspensión de pagos de dicha empresa. El pasivo exgible es de 9 millones de euros. El nombramiento de administrador concursal ha recaído en Alfa Asesores Concursales.
Contratas e Infraestructuras no desarrolla actividad alguna desde hace muchos años. Su único menester consiste en actuar como sociedad de cartera tenedora de dos participaciones societarias. Estas son un 65% de Cisa Guinea Ecuatorial y un 28% de Prasa Andalucía Occidental.
Filiales deterioradas
Ambas compañías arrastran una existencia languideciente y vienen contabilizando fuertes pérdidas. Como consecuencia de ellas, las participaciones que Contratas e Infraestructuras posee han experimentado una fuerte pérdida de valor. Tal circunstancia provocó que el año pasado Contratas e Infraestructuras registrara unas pérdidas de 12,2 millones.
El historial de impagos de la sociedad es muy extenso. Incluye descubiertos consecutivos desde 2014 hasta 2020.
Grupo Prasa, matriz de Contratas e Infraestructuras, entró en quiebra el pasado verano, con una deuda de 350 millones. De esta cifra, 100 millones corresponden a Hacienda.
Somhi Construcciones, tocada y hundida
Otra firma del sector del ladrillo que acaba mal es la catalana Construcciones Antauen. Su concurso de acreedores se ventila en el Juzgado Mercantil número 3 de Barcelona.
Antauen es la nueva razón social de Somhi Construcciones. El cambio de denominación es tan reciente que ni siquiera se ha publicado en el Boletín Oficial del Registro Mercantil.
Según el balance más actual, la empresa deja una deuda del orden de los 6 millones de euros, contra un activo de 8 millones.
La compañía se fundó en 2014 con el nombre de Reformas Integrales Tres Torres. Manuel Real Forner suscribió el 100% del capital. Poco después le cambió el título societario por Somhi Construcciones. Ahora se llama Construcciones Antauen.
La firma registró un crecimiento vertiginoso. En apenas tres años, su facturación pasó de 3 a 13 millones.