Mesas de Vivero Sitges sobre el mar
Los secretos de Vivero Sitges, el restaurante mágico que opera un fugado a Andorra
El bufé sobre el mar tiene más de 5.500 reseñas y salió en una película: también esconde episodios inconfesables
Más información: Dos fugados recuperan el mejor 'beach club' de Cataluña
El sol se hunde a espaldas de la costa de Sitges (Barcelona), que ve cómo se apaga el día sobre el Mediterráneo. En la terraza del Vivero Beach Club, las copas de champán capturan los últimos rayos de luz. Es la estampa del lujo y del éxito.
Pero tras la fachada de este icónico negocio se esconde una realidad turbia. Una historia de tribunales, millones de euros y una fuga que tiene como protagonista a su máximo responsable.
El rostro visible de este paraíso es Nacho Soler. Es la cara del éxito que transformó un restaurante familiar en una máquina de facturar. Lo que pocos clientes saben es que Soler es casi, un prófugo.
Dos concursos culpables
Sobre Soler y su esposa pesan dos concursos de acreedores --uno de ellos del Vivero-- declarados como culpables. Por ello, se han exiliado a Andorra.
El primero es referente al Cafè del Mar Port Fòrum de Sant Adrià de Besòs, que terminó en insolvencia. El segundo, del propio Vivero, como explicó este medio.
Los dos percances mercantiles han terminado con la descalificación de Soler y su pareja y su fuga a Andorra, por bien que la sentencia sobre la segunda no es firme.
Imagen de Vivero Sitges, el 'beach club' de Sitges en manos de dos andorranos
El refugio dorado de Sitges
Mientras la justicia delibera, Soler opera a plena luz del día uno de los negocios más visibles y rentables de Sitges.
No se esconde. Su refugio es una atalaya de lujo con vistas directas al mar Mediterráneo.
Soler tomó las riendas del Vivero en 2013, antes de que empezaran sus problemas, y después de operar el Palacio de Congresos de Cataluña en Barcelona.
Aplicó una fórmula empresarial de éxito: diversificó la oferta con zonas de restauración, coctelería y un popular club de playa. Supo explotar como nadie una ubicación simplemente perfecta.
Una vida de lujo a la vista de todos
Funcionó. El Vivero, que apareció en la película Savage Grace, estrenada en 2008 con Julianne Moore y Belén Rueda, se ha convertido en epítome del buen vivir en Cataluña.
Al no ser Andorra parte de la UE, los mecanismos no son automáticos. Esta circunstancia le ha permitido, hasta ahora, continuar con su vida y sus negocios en Sitges.
El público también lo ha premiado: presume de más de 5.500 reseñas en Google, la mayoría de ellas positivas.
El restaurante y 'beach club' Vivero, en Sitges
Sombras
La situación plantea serios interrogantes sobre el futuro del local, que opera sobre una concesión pública que descansa en los despachos de la Demarcación de Costas. No sería el primer club de playa con problemas, como detalló Crónica Global.
Por ahora, el negocio sigue funcionando a pleno rendimiento. El Mediterráneo sigue oscureciéndose cada tarde frente a su terraza y las copas siguen brindando.
Vivero Sitges mantiene así su doble cara. Para el público, es el sinónimo del verano perfecto. Para la justicia, es el cuartel general de uno de sus empresarios con menos fortuna de Cataluña. El secreto a voces de un paraíso frente al mar.
