
Teresa Ribera, Comisaria de Competencia de la Unión Europea
Bruselas multa a Glovo y Delivery Hero con 329 millones de euros por prácticas abusivas
Se ha constatado que intercambiaron información sensible o ejecutaron acuerdos para no contratar empleados de la otra empresa y repartirse el mercado
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La Comisión Europea ha anunciado este lunes una multa de 329 millones de euros a Glovo y Delivery Hero por violar las reglas de competencia de la Unión Europea con prácticas ilegales y abusivas.
Entre estas prácticas, se ha constatado que intercambiaron información sensible o ejecutaron acuerdos para no contratar empleados de la otra empresa y repartirse el mercado dentro del Espacio Económico Europeo.
Bruselas sitúa el inicio del cártel entre dos de las principales marcas del sector del reparto de comida a domicilio en julio de 2018, cuando Delivery Hero adquirió una participación minoritaria en Glovo. Las prácticas dejaron de ser punibles en julio de 2022, al pasar Delivery a controlar completamente la empresa española.
Descuento del 10%
La Comisión acusa a ambas compañías de haber retirado "progresivamente" durante ese periodo las "restricciones competitivas" que las separaban, para sustituirlas por una coordinación anticompetitiva a varios niveles.
Por este motivo, los servicios comunitarios imponen una multa de 223,2 millones de euros a Delivery Hero y de 105,7 millones a Glovo, tras aplicar un descuento del 10% por reconocer su participación en el cartel y aceptar su responsabilidad.
Tres infracciones
En concreto, la Comisión sanciona tres infracciones. La primera: cláusulas recíprocas que impedían que una empresa contratara personal de la otra. Este pacto, que al principio solo afectaba a ciertas categorías, acabó extendiéndose hasta influir prácticamente en toda la plantilla.
La segunda infracción tiene que ver con el intercambio de información sensible, como políticas de precios, estrategias comerciales, costes o capacidad de producción, con el objetivo de alinear su comportamiento e influir en los mercados europeos.
La tercera práctica abusiva identificada por Bruselas se refiere a los acuerdos para dividirse los mercados nacionales de la venta online de comida dentro del EEE.
Esto incluía tanto evitar competir en los países de la otra como coordinar su entrada en mercados donde aún no estaban presentes, restringiendo así la competencia real en varias regiones.