
El Puerto de Aiguadolç, Albert Bertran, CEO de la marina y Xavier Cuyàs, gerente
La guerra en el Puerto de Sitges escala con una condena penal al gerente
Aiguadolç, una de las marinas-estrella de Cataluña, ahonda en su crisis con un revolcón en los tribunales y el presidente de la patronal al frente
Más información: Lío con las concesiones en el puerto más 'posh' de Sitges
Envenenada. La guerra en el puerto deportivo de Sitges (Barcelona) ha escalado y ha derivado en una condena penal al gerente. El pulso por la concesión de Aiguadolç, una de las marinas-estrella de la Generalitat y que dirige el presidente de la patronal, ha terminado en una sentencia por coacciones.
Lo detallan fuentes cercanas a los hechos, alertando de que el gerente de la dársena, Xavier Cuyàs, ha encajado un castigo penal por coacciones por cambiar la cerradura de su casa a un adjudicatario. La sentencia ha sido ratificada en segunda instancia.
El lance añade tensión a la disputa que prendió en 2022 cuando se prorrogó la concesión a la empresa Port Sitges Aiguadolç SA por 50 años. Es una firma que comanda Albert Bertran, también presidente de la patronal Acpet de puertos deportivos de Cataluña.
"Le cambiaron el cerrojo"
Las fuentes conocedoras indican que el choque se produjo en uno de los concesionarios del llamado Poblado Marinero, uno de los espacios residenciales de la marina, que presume de 471 amarres situados a solo 30 minutos de Barcelona.
En este espacio, donde empresarios retirados y en activo buscan cierto asueto junto al mar, ha estallado una rebelión contra Port Sitges. El culmen de la tensión se ha alcanzado cuando la empresa cambió el cerrojo de una de las viviendas y el dueño denunció al gerente. Éste ha sido condenado por coacciones.
Cambio de alquileres
El germen de la pugna es la prórroga de la concesión a Port Sitges en 2022. Cuando la empresa de Bertran revalidó el título de explotador y se revocaron las concesiones de los subconcesionarios.

Imagen del Port d'Aiguadolç, en Sitges
La empresa fijó nuevas condiciones de alquiler para viviendas y locales comerciales --con precios más elevados--, y parte de los presentes montaron en cólera. Alegaron que la concesión de Aiguadolç se había alargado de forma "irregular".
Afectados
Entre los afectados, varios centenares de empresarios y residentes, ha habido actitudes dispares. Una parte ha acudido ha impagado los onerosos alquileres y ha acudido a los tribunales. Otra, se ha marchado de la dársena.
Otros emprendedores han hecho caso omiso del conflicto y han tratado de reconvertir la marina, como detalló este medio. Por ahora, con suerte irregular.
El concesionario que ha logrado condenar al gerente pertenece a los primeros, los díscolos.
Port Sitges: "No pagaba"
A preguntas de este medio, Albert Bertran, director ejecutivo de la instalación, ha admitido solo una "condena leve por coacciones". El directivo ha precisado que fue el puerto quien avisó a la inquilina de que su propiedad iba a ser okupada.
Para evitar ese riesgo, cambiaron la cerradura de su puerta. En respuesta, ésta les denunció por coacciones, y ha ganado el asunto. Eso sí, Bertran recuerda que Port Sitges es concesionaria del negocio desde el 1 de julio de 2022, y los arrendatarios que no pagan "son okupas" a todos los efectos. Sería, insiste, el caso de esta ciudadana.
"Hemos ganado todos los pleitos"
La empresa, en la que participa el bufete de abogados Castilla Abogados, reconoce que hay inquilinos rebeldes que no pagan, pero recuerda que "ha ganado" todos los pleitos con ellos. Es así porque "la ley está de su parte".
Lo que es más, el Puerto señala a los rebeldes, subrayando que "subarriendan sus activos para sacarles rendimiento económico". No son, insiste el directivo, "personas vulnerables".
De este modo, el concesionario "espera" las resoluciones favorables, que van llegando "paulatinamente", por bien que la ley "no destaca por su celeridad".
"Hacemos obra social"
El ejecutivo, también presidente de la Asociación Catalana de Puertos Deportivos y Turísticos (Acpet, por sus siglas en catalán) destaca que Aiguadolç "hace obra social". Pone como ejemplo que deja residir "sin coste" a dos señoras mayores que no pueden pagar el alquiler.

Imagen nocturna del Puerto de Aiguadolç
Asimismo, ha cedido un piso por un "alquiler simbólico" a un pescador.
Vox: "Se acosa a vecinos y comerciantes"
Por su parte, Vox, con un concejal en Sitges, denuncia el "acoso" del Puerto a "vecinos y comerciantes". En conversación con este medio, el edil, coordinador local y letrado José Antonio Gilabert, admite que "conoce la condena" al gerente.
E insiste en que "el pulso sigue" en Aiguadolç. Ante ello, la fuerza verde ha pedido declarar bien cultural el poblado de pescadores, núcleo de la revuelta, para encauzarla.
Una patronal y cambios
Versiones aparte, la trifulca en la marina deportiva en el Garraf ha impactado en su propia reputación y por contacto, en la de asociación Acpet, que preside Albert Bertran desde 2018.
No en vano, los puertos catalanes son escenario de pelea atroz para lograr su concesión. Un ejemplo es la renovación a Port Sitges, sí, pero también hay otro en El Masnou, donde el ayuntamiento ha articulado una operación política para cortar el paso a los fondos de inversión en la ampliación de la concesión, detalló Crónica Global.
Y es que el venture capital se ha fijado en los puertos de asueto catalanes. Como muestra, cabe recordar que Port Premià fue comprado en 2024 por el vehículo agresivo GED y Gythio, anteriormente Nauplia Capital.