Los propietarios de alquiler temporal rebaten el veto de Collboni en Barcelona
Los dueños de viviendas, apoyados por el catedrático Joan Manuel Trayter, alegan contra el plan por ser "un ataque a la pequeña propiedad"
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Los propietarios de viviendas de alquiler temporal en Barcelona rebaten el veto del ayuntamiento. Los dueños, junto a otros operadores, han presentado alegaciones a la modificación del Plan General Metropolitano (MPGM) que prohibirá estos arrendamientos de hasta 11 meses. Lo han hecho con la ayuda de un informe del catedrático de Derecho Joan Manuel Trayter.
En la queja, a la que ha accedido este medio, los dueños de viviendas esgrimen poderosos argumentos contra el plan, y exigen su retirada. Recuerdan que este tipo de cambio legal debe hacerse por medio de una ley aprobada en un Parlamento.
Detectan, pues, un problema competencial, ya que los planes van contra la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), que es una norma de estatal.
"Ataque" al pequeño propietario
En su exposición, los firmantes alegan que con ello "se altera el estatus jurídico del propietario", cuando no se puede hacer.
En este sentido, advierten de que el derecho de propiedad está reconocido en la Constitución Española y el Estatuto de Autonomía de Cataluña.
El Constitucional no lo permite
Los alegantes recuerdan que el Tribunal Constitucional fija en varias sentencias que no se puede modificar un derecho de esta índole en un nivel menor.
Sin embargo, Barcelona ha "atacado" al "pequeño propietario". Se le hace responsable, aducen, "de una cuestión que deberían haber solventado los poderes
públicos en el Estado Social de Derecho".
Informe del catedrático Trayter
Por ello, los perjudicados se han apoyado en un informe del prestigioso catedrático de Derecho administrativo Joan Manuel Trayter. El especialista también preside de la Asociación Española de Derecho Urbanístico (Aedur).
En sus motivos, el también profesor de Derecho en la Universidad de Girona enfatiza que son las administraciones las que deben invertir en un parque de vivienda social, no los pequeños propietarios. Así, se recuerda que sólo el 2% de viviendas en España son de protección pública, por un 10% en todo el continente.
Alquileres cortos por diversos motivos
En este sentido, los propietarios hacen hincapié en que el alquiler temporal tiene una razón, y es cubrir la demanda de vecinos que pasan por la ciudad por estudios o intervenciones médicas, entre otros.
Son arrendamientos de hasta un año de duración.
Veto del ayuntamiento
No obstante, el Ayuntamiento de Barcelona lo quiere prohibir. El gobierno municipal de Jaume Collboni (PSC), apoyado por BComú, avanzó que buscaría cambiar el PGM para dejar fuera de la ley otros usos de vivienda habitual y permanente.
El cambio normativo se aprobó inicialmente en una comisión municipal en diciembre. Ahora, el Ejecutivo local tendrá que llevar la iniciativa al pleno. Necesita los 19 votos de socialistas y comunes, sí, pero sumar al menos los de ERC o Junts.
"Vulnera la legalidad"
Antes, sin embargo, los dueños de viviendas alquiladas por un plazo de hasta 11 meses han contestado, y tratarán de detener la tramitación. En el escrito de alegaciones, consultado por este medio, ven "falta de motivación" de la MPGM y "vulneración del principio de legalidad y jerarquía normativa".
Asimismo, con la ayuda del catedrático Trayter, detectan "falta de racionalidad y coherencia urbanística" en la medida. Y una "infracción del principio de proporcionalidad". Ven el veto de Barcelona, pues, "desproporcionado".
Va contra la Constitución
No menos grave es la alerta que lanzan sobre el citado "ataque al pequeño propietario", que supondría limitarles el derecho a alquilar de 31 días a 11 meses.
Los alegantes apostillan que la atribución a la propiedad menor está recogida en el artículo 33 de la Constitución, por lo que la nueva norma barcelonesa supone un quebranto de la Carta Magna.
Precios de los alquileres
Este choque llega en el marco del repunte de los alquileres en la capital catalana. Según los últimos datos disponibles de la Generalitat de Cataluña, la renta media mensual alcanzó los 1.156 euros en la urbe en el tercer trimestre del año.
Por distritos, el más caro para vivir es Sarrià-Sant Gervasi, con 1.624 euros de media. El más barato es Nou Barris, donde arrendar una vivienda cuesta sólo 767 euros al mes.