La familia Pagès, uno de los grandes nombres del turismo catalán, ha frustrado la entrada de capital chino en el termalismo catalán. Grup RV se ha "atrincherado" y ha vetado una operación de 20 millones de euros para que un inversor asiático entre en los hoteles wellness de la región y profesionalice su gestión.
Lo han detallado fuentes del sector hotelero, lamentando que Grup RV ha impedido que un inversor de la potencia económica ponga un pie en los dos hoteles termales de Caldes de Montbui (Barcelona), una de las capitales del bienestar en la autonomía.
El operador chino quería entrar en la compra de los hoteles Broquetas Spa Termal y Vila de Caldes, de tres y cuatro estrellas, pero no ha sido posible.
"El operador se ha atrincherado"
Las fuentes consultadas recuerdan que el inversor internacional quería la casa de baños-hotel abierta por la familia Broquetas en 1729, y el aún más icónico Vila de Caldes, que aperturó la familia Solà en 1680.
Los dos activos se incorporaron al portafolio en concepto de gestión en 2021, y con ellos, RV sumó 115 habitaciones e instalaciones termales, con baños que presumen de agua con temperaturas de hasta 74 grados. Esas dos incorporaciones engrosaron el portafolio de los Pagès hasta los 12 hoteles. Hoy llegan a 25.
Pero la firma catalana se "atrincheró", y la adquisición, que habría sido la primera china en la hotelería catalana, ha caído.
Profesionalización
Desde el sector inmobiliario lamentan que la operación haya colapsado porque "hubiera ayudado a profesionalizar aún más el sector del termalismo catalán". En un contexto en el que el turismo del país asiático ha explotado en Cataluña por la recuperación de los vuelos directos entre El Prat y Beijing y Shanghái tras la pandemia del coronavirus, cuando se discontinuaron.
Zona de piscina del hotel Vila de Caldes
"El precio de los activos era adecuado, pero Grup RV no quería irse. Ha frustrado la operación", han insistido las mismas voces.
Crecimiento
Tenga que ver o no, la firma de la familia Pagès, que no ha contestado a las reiteradas peticiones de este medio, está en una posición muy expansiva. En 2023 alcanzó una facturación de 46 millones de euros, casi doblando los ingresos desde 2021. El ebitda o beneficio bruto llega al 35%, y su rentabilidad, al 7%.
Opera tres líneas de negocio: las colonias Rosa dels Vents, de donde nació el negocio; RV Hotels, con los alojamientos en gestión; y Urbany, una línea de hostels urbanos con dos establecimientos en Barcelona y otro en Londres. En total, son 25 activos y 5.200 habitaciones.
Un 'escolta' tornado empresario
Josep Pagès, nacida en el Empordà, armó el negocio tras ser escolta o scout de joven, según declaró él mismo. Tras esa experiencia, creó una línea de vacaciones para jóvenes que es líder en Cataluña. De esa pata, nacieron las dos otras: la hotelera y la de alojamientos urbanos.
La firma ha experimentado un rápido crecimiento hasta establecer su propio holding en el Eixample de Barcelona. El capital social de la matriz tiene unos saludables nueve millones de capital social. Está enteramente controlado por la familia.
Fiscalía investigó un tropiezo con los viajes
Esa espectacular trayectoria tuvo un ligero traspié durante la crisis económica de principios de los 2010, cuando el auroperador Uniplayas, controlado por RV, fue a concurso de acreedores arrastrado por el golpe económico global.
La insolvencia fue bronca, con los dos administradores, el propio Pagès y su socio Eduard Buxaderas, denunciados por presunta administración desleal por el gigante hotelero balear Riu, de la familia Fluxà.
La querella no fue a más, y el concurso acabó archivado por falta de masa activa en 2017, según el Registro Mercantil.