¿Quién guio a Audax Renovables a Montenegro? El grupo español de renovables guiado hoy por el empresario e influencer José Elías trató de construir un parque eólico en el microestado en una operación que ha terminado querellada ante la Audiencia Nacional. De la documentación que acompaña la denuncia, se desprende que Fersa, antececesora de Audax y hoy parte del conglomerado, utilizó un bróker fantasma, una empresa inexistente, para su proyecto en el estado balcánico.
Lo destapó la juez Katerina Pekovic, juez titular de la sala de Primera Instancia de Montenegro, en 2022. En el marco de un proceso civil contra Audax, que ganó la empresa, la togada alertó de que el intermediario que la había traído al país no existía.
Ello arroja una sombra más sobre un proyecto que terminó vendido de forma opaca a Enemalta, la energética de Malta.
Un 'bróker' barcelonés
Años antes, a mediados de los 2.000, Fersa intentó expandirse en Montenegro con el proyecto Mozura Wind Park, una instalación de cerca de tres millones de euros. Lo curioso es que la antecesora de Audax, hoy integrada en esta, utilizó a un bróker para este crecimiento.
Este intermediario era BWP Europe Consulting, con sede en el Paseo de Gràcia de Barcelona. La dirigía Alex Requesens, un directivo del sector tech de la Ciudad Condal, hoy reubicado en Andorra. BWP se comprometía a "facilitar" la llegada de la española al estado balcánico. Como contrapartida, recibía 100.000 euros por megavatio (MW) instalado.
El contrato lo firmaron el propio Alex Requesens e Ignacio Moreno, entonces CEO de Fersa, hoy en Siroco Capital.
La juez dice que no existe
Ese contrato es sospechoso. Es así porque la juez Pekovic, en un pleito civil sobre el mismo tema interpuesto por otros dos intermediarios contra Audax --ya con Fersa integrada-- resuelve que "durante el proceso se estableció que esta entidad legal --BWP Europe Consulting-- nunca estuvo registrada en el Registro Mercantil de Barcelona ni en los registros de otras provincias del Reino de España".
Lo que es más, la magistrada, utilizando los mecanismos de colaboración entre estados, no halló rastro alguno del bróker en "el Registro Mercantil Central del Reino de España", como tampoco su CIF, advierte.
Ya se había marchado a Andorra
Cuando la magistrada alertó de los hechos en 2022, el intermediario ya estaba en un tercer país. Alex Requesens fue broker de empresas para Montenegro hasta 2021. Tras ello y justo antes de la resolución de la juez, se estableció en Andorra, donde opera una sociedad llamada Amura7Medical, una intermediaria de material médico.
Este medio ha preguntado al directivo por su versión de los hechos. No ha obtenido respuesta.
"Una cotizada utilizó una empresa inexistente"
Preguntado por la cuestión, otro de los intermediarios para Audax en aquella operación, Vladimir Popovich, ha alertado de que "toda una empresa cotizada como Fersa, ahora Audax, "utilizó un contrato de tres páginas firmado con una empresa inexistente para venir a Montenegro".
Además, el directivo alerta de que en los contratos de la operación, se cita a BWP de cuatro formas distintas: como BWP Europe Consulting; BWP Montenegro, BWP Energy y BWP Group. En el Registro Mercantil de Barcelona, figura solo una sociedad con el nombre de Blue Wind Project Europe. La fundó Marc Requesens, hermano de Aleix y hoy CEO de Kaktus Eyewear.
Elías: "Es un asunto del pasado y ganamos ese caso"
Por su parte, José Elías, presidente de Audax, ha recordado a este medio que el caso civil de Montenegro "lo ganó la empresa, y no los denunciantes". El ahora máximo directivo circunscribe la operación a un asunto de Fersa, no a su marca actual, y de "muchos años atrás".
Elías asegura que cuando ascendió a los puestos de responsabilidad "condujo una investigación interna que no halló irregularidad alguna". En relación a la nueva querella por varios presuntos delitos, la atribuye a "un intermediario descontento que quiere cobrar una cantidad desorbitada". Esa cifra se sitúa en los 70 millones de euros, cuando Audax "vendió el parque de Montenegro por apenas tres millones".
La venta fue irregular
Lo factual es que la inexistencia del bróker para Audax añade sombras a una operación sospechosa. Es así porque la energética de José Elías vendió el proyecto a una sociedad sita en Islas Seychelles, Cifidex Ltd, al considerarla no estratégica en 2015. Seychelles era, aquel año, un paraíso fiscal a ojos de la Comisión Europea.
Hay más. Tras asumir el parque eólico Mozura, Cifidex lo vendió a Enemalta, la energética de Malta. Lo colocó por 10,3 millones de euros, cuando Audax se la había vendido por apenas 2,9 millones unas semanas antes. Hay una discrepancia de 7,4 millones en apenas días.
Fue una de las irregularidades de la venta que destapó un informe interno de Enemalta publicado en 2021 [leer aquí]. El forensic interno afloró todo tipo de anomalías, como la falta de una due dilligence consistente o la falta de control por parte del consejo ejecutivo.
Una empresa catarí financió la venta
Un paralelo, una investigación conjunta de Times of Malta y Reuters añadió otros elementos inquietantes al caso. Las pesquisas concluyeron que Black Ltd, una empresa con sede en Emiratos Árabes Unidos (EAU), financió la compra del parque por parte de Cifidex a Audax de 2015.
Black Ltd la controlaban, según estos medios, el directivo de la energía Turab Musayev y el magnate maltés Yorgen Fenech. La financiera se llevó 4,6 millones de euros en bonus de beneficios tras la venta sospechosa.
Una periodista asesinada por investigarlo
Por otro lado, una periodista maltesa que investigó el caso, Daphne Caruana Galizia, fue asesinada por medio de coche-bomba en 2017. Yorgen Fenech, director de Black Ltd, financiadora de la compraventa del parque de Montenegro, es uno de los investigados por, cree la Fiscalía, ordenar la ejecución de la reportera. Se le acusa de conspiración para asesinar, entre otros cargos. El ministerio público le pide cadena perpetua.
Fenech ha entrado 16 escritos para salir en libertad bajo fianza, pero los tribunales los han rechazado. Asimismo, se le han congelado los activos a la espera de que se determine si ordenó el asesinato de la periodista, cuyo trabajo continúa ahora una fundación.