El presidente de Pimec, Antoni Cañete, ha llegado a la noche grande del año de la patronal de pymes catalana, la 37ª edición de los Premis Pimes, con un impulso destacado: Conpymes, su homóloga a nivel estatal encabezada por José María Torres, conseguía horas antes que el Gobierno le diera entrada en el Consejo Estatal de la pyme y en el Observatorio Estatal de la Morosidad Privada. Los socialistas y Sumar no le han otorgado la representatividad que tanto ansía y que validaría un proyecto iniciado hace casi cinco años, pero le come el terreno a CEOE y a Cepyme y rompe el tablero de la concertación tradicional que ha persistido en España desde el inicio de la democracia.
Poco antes del inicio de la noche de Pimec se apeaba del acto su gran estrella, el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El socialista alegó problemas de agenda y ni siquiera se desplazó a Barcelona el mismo día en el que se cerraba en Bruselas el acuerdo con el PP para renovar de una vez por todas los órganos judiciales de España y que se empezaban a conocer los primeros nombres de los beneficiados por la ley de la amnistía. Con todo, Cañete se presentó ante los suyos crecido y consciente de que empieza a dar una impromta propia a la presidencia de la patronal.
Mensaje a Junts y nuevo modelo de financiación
Su discurso estuvo alineado con el signo de los tiempos y en sintonía con la proximidad que Pimec ha mostrado con el último Govern, el de Pere Aragonès; nada excepcional si se tiene en cuenta que la patronal de pymes ha tejido siempre alianzas con los gobernantes de turno de la Generalitat.
Ahora, con el Parlament bloqueado, como quedará claro este miércoles, Cañete advirtió de que las "minorías no pueden condicionar el interés general", una frase que desde la sala se interpretó como un mensaje directo a los políticos independentistas, básicamente Junts, que insisten en que pueden conformar un Ejecutivo en Cataluña aunque sus números no sumen.
Afirmó que ha llegado "la hora de los grandes consensos, de acuerdos diferentes y de estabilidad" y reivindicó un nuevo modelo financiación "tractor" y "no extractor" para Cataluña. Defendió que el statu quo actual "gripa el motor de la economía catalana y, por lo tanto, de España".
Collboni pide "gobiernos que gobiernen"
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, participó en la noche de las pymes y recalcó la importancia de "tener gobiernos que gobiernen, y tener un marco legal y estable", así como de una "colaboración público-privada", para impulsar la economía. Recordó, asimismo, que "las pymes son el 95% de las empresas de Barcelona".
En cuanto al presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, elevó el tono de las palabras de Cañete, dándole un aire catastrofista a su discurso. Habló del "expolio fiscal para Cataluña" que aseguró que el territorio vive en otra reivindicación de ERC para que el Gobierno le otorgue una "financiación singular", un epígrafe que para muchos es la demanda del concierto vasco, un rara avis sin análogos en Europa, pero que se tendrá que concretar a lo largo de la negociación del próximo Ejecutivo catalán.
Y es que Salvador Illa considera a los republicanos como una parte imprescindible del pacto de izquierdas con el que espera llegar a la Generalitat, una suerte de reedición del tripartito en 2024. El líder del PSC también estuvo en la noche de Pimec junto al Ministro de Industria, Jordi Hereu. El presidente del Parlament, Josep Rull, ejerció como cargo institucional de mayor rango de la legislatura en curso.
Jordi Pujol arropa de nuevo a Pimec
Con todo, la presencia más destacada de la noche empresarial fue la del expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que volvió a la esfera pública a pesar de su delicadez para arropar de nuevo a Pimec. Cabe recordar que el convergente fue el diseñador original de la representatividad en Cataluña y el político que dio paso a la patronal de pymes en los órganos de concertación social del territorio.
Cerca de él se sentó el exlíder de ERC, Oriol Junqueras, a quien Cañete había ido a visitar en la cárcel; así como el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol.
Josep Oliu junto a Jaume Guardiola
En el plano empresarial destacó la presencia del presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu. Compartió mesa con Collboni y Rull y con su antigua mano derecha en la entidad nacida en Cataluña, el actual director del Círculo de Economía, Jaume Guardiola. La dupla despertó el interés de los asistentes y fue comentada tanto en las mesas como en los corrillos posteriores al evento.
Pimec cumplió con su liturgia anual y premió a las empresas que considera que han destacado más durante el último año en Cataluña. Todas ellas pymes y autónomos, su ámbito de actuación que lucha por exportar a nivel nacional.