Desigual celebra sus 40 años de historia con un cambio de estilo y el recorte de la mitad de su deuda

El mundo de colores de Desigual cumple cuarenta años en 2024 y la marca lo ha celebrado con un cambio de estilo de 180 grados que el público ha percibido desde hace ya algunos meses. Las amantes de la moda se han vuelto a enamorar de la marca de 'la vida es chula'. La celebración del aniversario y la presentación definitiva del rebranding ha culminado con un desfile en el puerto de Barcelona este jueves, con el que se ha presentado la colección primavera-verano 2025, con un viaje a través de los cuarenta años de historia de la firma.

Tras un lustro perdiendo clientes, las cuentas de Desigual en 2023 lograron reducir a la mitad las deudas de la empresa y saldar por completo el déficit contraído durante el Covid. Pese a que aún no ha sido capaz de recuperar la facturación récord de 2014, en los tres últimos ejercicios ha incrementado las ventas a un ritmo de un 15% año tras año.

Transformación de la marca

Thomas Meyer, fundador y presidente, de Desigual ha expresado durante la celebración del jueves que lo que les hace únicos como marca es "el espíritu inconformista y de transformación continuo" y ha admitido que se encuentran "en uno de los momentos más importantes" para la compañía, tras haber "construido un nuevo Desigual".

Thomas Meyer, fundador de Desigual, en el 40 aniversario de la marca Desigual

El proceso de reformulación de la marca empezó en 2019 y culmina con lo que han bautizado como la Glow Up era, conectando con una audiencia más joven gracias a colaboraciones con diseñadores como Alphonse Maitrepierre, Collina Strada o Maria Escoté y embajadoras de la marca como Nathy Peluso o Hari Nef.

Innovación

En estos años, Desigual ha fundado el Awesome Lab, un hub de innovación abierta a través del cual la compañía colabora con startups tecnológicas capaces de aportar soluciones a los principales retos de la industria de la moda y generar nuevas oportunidades de crecimiento. Y, además, se ha convertido en la primera empresa del sector textil en España en apostar por la semana laboral de cuatro días para sus trabajadores de la sede central.

Muchas de estas colaboraciones apoyaron a Desigual durante el desfile celebrado el jueves. La pasarela presentó espejos alineados uno tras otro, replicando la puesta de sol sobre la costa de Barcelona como telón de fondo y haciendo alusión al reflejo del pasado, presente y futuro de la marca.