La Cámara de Comercio de Barcelona urge a priorizar las grandes inversiones en infraestructuras hídricas necesarias para prevenir sequías y a adelantar el calendario previsto para desplegarlas. "Si hubiésemos hecho los deberes, no estaríamos en el punto en el que nos encontramos", ha señalado Eloi Planas, vicepresidente primero de la institución económica.
En una rueda de prensa en la sede del ente de dinamización empresarial, Planes ha reivindicado la interconexión del sistema Ter-Llobregat con el Consorci d'Aigües de Tarragona (CAT), que ha definido como "una solución necesaria" e "indispensable" a corto plazo. Es decir, a llevar hasta la zona donde vive la mayoría de la población de Cataluña los recursos hídricos sobrantes del Ebro, que ahora acaban en el mar.
Aunque el Govern en funciones se haya mostrado contrario al minitrasvase, el representante cameral ha augurado que el "sentido común" se impondrá gane quien gane las elecciones autonómicas del próximo 12 de mayo.
Emergencia por sequía
Planes ha lamentado la última "década de inversiones no hechas" y la "falta de apoyo a los sectores productivos y de una regulación positiva" hayan llevado a la situación actual, cuando la falta de lluvia condena al grueso de Cataluña a vivir una emergencia por sequía que irá a más si no llegan precipitaciones acusadas.
Los responsables de la Cámara de Comercio de Barcelona han valorado que la crisis debe resolverse "no buscando culpables" sino asegurando "que hemos aprendido del pasado". "Tenemos que estar seguros de que en Cataluña no dejaremos de lado esta transición hídrica", ha subrayado el también presidente ejecutivo de Fluidra.
"No podemos esperar hasta 2050"
Por su parte, la directora del gabinete de Estudios de Infraestructuras de Cambra, Alicia Casart, ha cuantificado en 5.200 millones de euros la inversión necesaria de aquí a 2040 -3.200 millones hasta 2030- para disponer de las infraestructuras garantizadoras del suministro de agua.
De hecho, ha indicado que los planes hídricos estratégicos metropolitanos deben "avanzarse diez años", ya que "no podemos esperar hasta 2050".
Está en juego el turismo...
Para el horizonte de 2030, ha reclamado desplegar "infraestructuras con urgencia", como la "aportación" del río Llobregat al Besòs, una actuación no prevista oficialmente pero que desde la Cámara consideran primordial. Lo que sí está en marcha es la instalación de potabilizadoras en el río Besòs.
Casart ha alertado de que la emergencia por sequía expone a "prácticamente el 81%" de la economía de las cuencas internas catalanas, que "concentran el 90% de las plazas turísticas". La industria ubicada en estas regiones depende de las restricciones hídricas de los ayuntamientos, que presentan una gran variabilidad con respecto a su agilidad y eficacia, según la responsable.
... y la industria
Sin embargo, las fábricas de este mismo territorio que extraen su propia agua y no dependen de la red tienen otro régimen y están bajo la tutela de la Agencia Catalana del Agua (ACA), que ha impuesto un recorte del 25% en el consumo, una limitación que según Casart tiene "consecuencias graves", incluso para la "supervivencia" de la actividad industrial. "Estamos donde estamos porque no se ha invertido", ha sentenciado en referencia tanto a la Administración autonómica como municipal.
Casart ha pedido la rápida ejecución de proyectos como las conexiones de la red ATL (Aigua Ter Llobregat), la prospección de nuevos pozos o la desalinizadora de Tordera -que arrastra un "retraso importante" aunque parece encauzada a través de los fondos Next Generation-.
También ha aplaudido la iniciativa de los hoteleros de Lloret de Mar de comprar una desalinizadora propia y ha celebrado que la Generalitat se haya "mostrado abierta" a este tipo de soluciones privadas complementarias.