Los Jardines de Santa Clotilde se han convertido en uno de los grandes reclamos turísticos y cinematográficos de la Costa Brava. El singular conjunto botánico es una importante fuente de ingresos para el Ayuntamiento de Lloret de Mar, que ha sabido rentabilizar las entradas que pagan los visitantes para pasear por el recinto de 15 hectáreas, así como los rodajes de productoras audiovisuales.
Estas actividades han hecho que este parque consiga recaudar casi medio millón de euros al año: en 2023, los ingresos obtenidos fueron de 450.000 euros, según fuentes municipales. Esta cantidad termina en las arcas del consistorio, que las destina a sufragar los servicios públicos de la localidad.
118.000 visitantes
Anteriormente, los jardines, que se empezaron a construir a principios del siglo XX y vuelven a estar en obras actualmente por la construcción de un anfiteatro, eran propiedad de los marqueses de Roviralta. Sin embargo, hace 26 años pasaron a ser de titularidad pública, si bien la familia conserva la casa y un jardín privado, que utilizan para su uso particular y para organizar actividades privadas como el festival Som de Mar.
Hace un cuarto de siglo, consistorio y familia fundadora firmaron un convenio que permitió abrir el recinto novocentista a la población. Cada año, 118.000 personas pasan por los jardines, en comparación con las 147.000 que pasan en total por el Museo Abierto de Lloret, que es como este municipio de Girona se refiere a su patrimonio cultural al aire libre.
Cine, cultura y turismo
Santa Clotilde es la joya de la corona del Moll (museo abierto) de la localidad costera, aunque su futuro está en el aire este verano por la sequía. Aunque los hoteleros locales recurrirán a una desaladora privada, el Govern ha advertido que estos sistemas solo podrán usarse para llenar las piscinas, pero no para regar espacios verdes.
Más allá del jardín botánico, el resto de elementos del patrimonio cultural local logró recaudar más de 50.000 euros el año pasado, con lo que el total batió el medio millón, una cifra récord. Y es que las atracciones culturales de Lloret de Mar generan cada vez más interés entre los visitantes.
Los jardines, que en sus cerca de 100 años de historia han sido escenario de numerosas cintas y aparecen en la serie de HBO La casa del dragón, se alquilan para eventos como bodas y rodajes cinematográficos, lo que ha permitido además que el año pasado se organizasen visitas teatralizadas sobre la precuela de Juego de tronos en varios idiomas, una actividad que tuvo un gran éxito entre los turistas. Para los residentes del pueblo, las entradas son gratuitas e ilimitadas.