El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, ha negado este viernes que la entidad registre este ejercicio resultados extraordinarios, pese a que el banco ha dado a conocer unas cifras del primer semestre que son las más elevadas de la entidad desde la fusión con Bankia.
Con un tono más vehemente de lo habitual, el ejecutivo ha querido distinguir entre evolución interanual y beneficios en términos absolutos. "Crecemos mucho, es cierto, pero es porque venimos de niveles extremadamente bajos", ha aclarado.
Rentabilidad aun baja
Durante la rueda de prensa posterior a la publicación de las cuentas, Gortázar también ha reforzado su argumento con el factor de la rentabilidad, "que sigue siendo baja en el sector", como indica el hecho de que tanto Caixabank como la banca en general siga cotizando significativamente por debajo de su valor contable.
"No es cierto que estemos teniendo resultados extraordinarios", ha apuntado en alusión de los motivos que en su día esgrimió el Gobierno para establecer el nuevo impuesto a las entidades financieras, cuyo pago ha detraído algo más de 1.100 millones de euros de las cuentas de la gran banca (en torno a 375 millones en el caso de Caixabank).
"No es bueno para el país"
"No tiene sentido que tengamos que pagar un 40% de impuestos, muy por encima del resto de sectores", ha indicado Gortázar que, incluso, ha ido más allá al apuntar que "no creo que sea bueno, ya no para el sector sino para el conjunto del país, que la banca tenga estas condiciones".
El banco ha presentado sus resultados en una semana en la que la mayoría del sector ha hecho lo propio, con notables incrementos de beneficios basados, en una parte importante, del incremento del margen de intereses derivado de las subidas de los tipos de interés, que hace un año apenas habían empezado.
Estabilización de tipos
En este punto, Gortázar ha señalado que el escenario se estabilizará dado que "creemos que restan, como mucho, dos subidas más, aunque algunos apuestan incluso por una solo".
Así, las estimaciones de la entidad, con los datos del mercado, apuntan a que el euríbor acabara el año ya por debajo del 4% y que "en torno al mes de abril de 2024, las revisiones de los préstamos comiencen a ser a la baja".
Con este contexto, Gortázar se ha mostrado firme al señalar que 2023 “está lejos de ser el mejor año de la historia de Caixabank. Las cifras absolutas son mayores pero después de la fusión somos más del doble de grandes y los resultados no han evolucionado en esta proporción. Si además aún no somos capaces de cubrir el coste del capital… difícilmente podemos hablar de año histórico”.