Se reaviva la guerra por el control de la Fira de Barcelona. Pese a que enero se anunció un principio de acuerdo entre Ayuntamiento de Barcelona, Generalitat y Cámara de Comercio de Barcelona para desbloquear la renovación de su consejo de administración, esta tarde la representación del consistorio se ha partido en dos imposibilitando el nombramiento de una de las nuevas consejeras, Anna Navarro Descals, más conocida como Anna Schlegel. Fuentes consultadas por Crónica Global han sostenido que el acuerdo jamás llegó a formalizarse y que el consenso tradicionalmente suscrito entre todos los agentes institucionales se ha roto en esta ocasión. El acuerdo, inciden, se pactó más bien entre ERC, que controla en solitario el Govern, y la entidad de dinamización empresarial local.
Las socialistas Núria Marín y Laia Bonet se han abstenido en la votación de la candidata llevada a cabo en el consejo general. Por contra, Ada Colau y Ferran Mascarell han votado a favor y el quinto representante del ayuntamiento, Ernest Maragall, no ha asistido a la reunión. Pese a que las delegaciones de la Generalitat y de la Cambra han votado al unísono a favor de la directiva, la falta de mayoría del bloque consistorial ha impedido su designación.
Marín aduce falta de consenso
Un interlocutor cercano a Marín ha asegurado que "el nombramiento no se había consensuado" previamente con la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat. Ello pese a que hace apenas tres meses el pleno de la entidad cameral validó los nombres de Schlegel y Laura Carnicero como nuevas integrantes del órgano de gobierno de la Fira. El nombramiento de la segunda, vicepresidenta de recursos humanos de Seat, sí ha recabado la unanimidad de todas las Administraciones representadas.
De esta forma, la actualización del órgano directivo sale adelante tan solo a medias y a escasas semanas de las elecciones municipales. Las instituciones llevaban más de un año negociando los sustitutos de Kim Faura y Pedro Fontana, cuyo mandato ya había expirado en el consejo de administración que encabeza el consejero delegado de Mat Holding, Pau Relat.
Schlegel, candidata de la Cambra
Sí ha salido adelante la propuesta de renovación de las vocalías ocupadas por Luis Conde (Seelinger&Conde), Agustín Cordón (Culmia) y Miquel Martí (Moventia) por otros cuatro años. Además, seguirán como consejeros Mar Alarcón, Helena Guardans y Manel Vallet, que no han agotado su mandato.
Schlegel fue la escogida por parte de la Cámara de Comercio de Barcelona liderada por la lista independentista Eines de País para ocupar un asiento en el consejo de la Fira. La directiva escogida por Mònica Roca ha hecho su carrera en el sector tecnológico y en la actualidad es vicepresidenta de Procore, una sociedad radicada en California que diseña softwares para el sector constructor.
La cacicada de Poudevida
No es la única sacudida que ha experimentado recientemente la Fira. La elección de David Poudevida como nuevo director general de Fira 2000, la mercantil encargada de los desarrollos del recinto ferial, soliviantó al Ayuntamiento de Barcelona y la Cámara de Comercio de Barcelona, que consideraron que había sido impuesto de forma unilateral por la Generalitat.
Además, el perfil netamente independentista del gestor, vocal de Plataforma per la Llengua y exembajador autonómico en Argentina, generó malestar en la oposición al Govern. El PSC llegó a pedir la comparecencia parlamentaria de Poudevida para que diese explicaciones sobre su nombramiento.