El 'pucherazo' cameral de 2019 dopó a Eines de País con 12 vocales

La justicia ha hablado: las elecciones a la Cámara de Comercio de Barcelona de 2019 vulneraron los derechos fundamentales de los electores por el fiasco del voto electrónico. Además, las irregularidades que rodearon los últimos comicios habrían alterado 12 vocalías del pleno, compuesto por 60 miembros elegidos por sufragio, en beneficio de la candidatura independentista Eines de País que hoy controla la institución.

Pero aunque las resoluciones judiciales hablen por sí solas, quien hace tiempo que no tomaba la palabra era Carles Tusquets, el impulsor de esta lucha contra la cúpula de la entidad de dinamización empresarial local y la Consejería de Empresa y Trabajo. Este lunes lo ha hecho en un encuentro informativo que llega pocos meses antes de que las empresas catalanas vuelvan a las urnas para renovar los órganos internos de la Cámara de Barcelona.

Presentación de la candidatura Eines de País a las cámaras de comercio catalanas, con Joan Canadell (c) y Mònica Roca (2i) / EUROPA PRESS

"El pleno no sería el actual"

Tusquets ha roto su silencio para rememorar todas las irregularidades que marcaron las últimas elecciones y que, como ha dejado entrever el representante de TREA Capital Partners, van camino de repetirse si el departamento dirigido por Roger Torrent no remedia algunos indicios preocupantes. Por ejemplo, la falta de una doble autentificación en el voto electrónico, como se recoge en el borrador del nuevo decreto electoral, y el fichaje del mismo auditor que supervisó el anterior procedimiento. Además, el concurso para elegir a este árbitro se ha hecho en base a un decreto de convocatoria electoral aún por publicar.

"Estamos convencidos de que si se hubiesen hecho las cosas bien, con un voto robusto y bien planificado, el pleno y el consejo ejecutivo de la Cambra no serían los actuales", ha afirmado. En este punto, ha denunciado los 600 votos anulados que hubieran modificado a su juicio el sentido del voto en 12 epígrafes. "No estoy en contra de que se haga el voto electrónico, pero quiero que tenga las mismas garantías que el presencial", ha apostillado.

Voto electrónico sin robustez

Aunque el empresario se ha mostrado confiado en que la actual consejería corrija los defectos del anterior proceso, no ha aclarado si volverá a presentarse a los comicios. "Primero quiero saber que las reglas del juego están claras", ha dicho. Las cautelas de Tusquets vienen avaladas por la experiencia. En compañía de la letrada Mercedes Cuyás, socia del despacho Área Pública Abogadas, ambos han desgranado tanto el iter judicial de los cuatro años anteriores como los principales argumentos por los que impugnaron el proceso electoral.

El principal, la falta de robustez del voto electrónico. Es decir, la ausencia de dos factores de autentificación como se requería en el voto presencial, del cual no se impugnó ni una sola papeleta. Pero también las anulaciones de votos en base a la dirección IP que se llevaron a cabo a posteriori en comandita entre el auditor y Scytl, el prestador de la plataforma de votación electrónica.

Carles Tusquets, candidato a la Cámara de Comercio de Barcelona / LENA PRIETO

'Invención' del voto nulo

Tanto Cuyás como Tusquets han remarcado la ilegitimidad de esta operación puesto que en "el decreto electoral no existía el voto nulo". "Mediante un sistema de auditoría inaceptable se extrajeron votos de la urna que se pusieron bajo sospecha y se llamó por teléfono a varias personas. También se anularon votos que salían de la misma IP como si fuese irregular", ha explicado Cuyás.

Hasta la fecha, todas las sentencias tanto en primera como en segunda instancia han dado la razón a Tusquets y a otros 20 recurrentes de su candidatura --además, otro empresario obtuvo sentencia firme anulando el decreto de convocatoria electoral por un defecto de forma--. A lo largo del litigio, incluso el ministerio público se posicionó del lado de la parte actora dada la vulneración de derechos fundamentales demostrada en sede judicial, como ha puntualizado la abogada.

Filibusterismo de la Cambra

Pese a ello, el filibusterismo de la Cambra y del Govern ha retrasado los plazos que tenían en mente los demandantes. "Contábamos con tener el asunto resuelto y cerrado en un año. Han pasado cuatro, porque desde 2019 estamos con los dimes y diretes. Una cosa es que el sistema sea garantista y otra que abuses del sistema. Nos lo han impugnado y discutido todo, hasta nuestra legitimación. Ha sido una carrera de obstáculos", ha exclamado Cuyás.

Pero las victorias judiciales de Tusquets no han servido para revertir el resultado electoral de 2019. La Administración autonómica, como ha lamentado el empresario, ha optado por echar balones fuera y preparar los trámites de las elecciones camerales previstas en el calendario este mismo año. Es decir: ni gestora, ni adelanto electoral.

Ejecución judicial

Sin embargo, queda pendiente la ejecución de la sentencia, que no se ha producido porque el asunto aún sigue vivo en el Supremo debido a un recurso de la Cámara de Barcelona.

La ejecución judicial podría conllevar tanto la anulación de actos administrativos --algunos polémicos como la reducción de las llamadas sillas de plata y la retirada de la corona del escudo institucional-- como el resarcimiento por daños y perjuicios a las partes afectadas. La lucha sigue.