Las residencias del Mandarin venden sus cuatro áticos

La promoción inmobiliaria Passeig de Gracia 111, las Mandarin Residences, que son los mejores pisos de Barcelona y los más caros de España, ha colocado los cuatro áticos que tenía a la venta. Ello en un contexto de restricción de visitas tras informar este medio en exclusiva de que la pandemia había detenido el interés del mercado. 

Sea como fuere, las residencias construidas por el fondo KKH Property Advisors y operadas por la cadena hotelera honkgonesa Mandarin Oriental están finalmente hallando salida en el mercado. Segun fuentes conocedoras de la comercialización, el rascacielos ha colocado más del 60% de las unidades, incluidos los cuatro áticos que tenía a la venta. 

Los más caros de España

De este modo, se han vendido los pisos más caros de España, toda vez que cada penthouse de las Mandarin Residences se ofrecía a unos 45.000 euros el metro cuadrado, o lo que es lo mismo: más de 25 millones de euros. 

Las mismas fuentes confirman que en el inmobiliario barcelonés "no hay producto igual en estos momentos", por lo que las residencias están atrayendo a compradores "de todo el mundo". 

Venta restringida

Los interesados, no obstante, se encuentran con restricciones después de que Crónica Global y Metrópoli fueran los primeros medios que entraron en la lujosa promoción, que ocupa la antigua Torre Deutsche Bank, donde KKH proyectó un hotel operado por Four Seasons, pero el primer gobierno de Ada Colau lo frustró. 

Tras aquellas informaciones, Savills, una de las intermediarias que se encarga de la venta, está haciendo comprobaciones de potenciales clientes para evitar más fugas de datos. 

Pulveriza a Francesc Macià 10

Sea como fuere, las residencias de Mandarin Oriental han superado a Francesc Macià 10 como promoción inmobiliaria más exclusiva de Barcelona. En el nodo de la upper diagonal, Squircle Capital firmó un bloque de lujo que también notó los efectos de la pandemia del coronavirus. 

Tras ello, la gestora de inversiones de José Caireta se retiró del negocio, en plena polémica por sus lazos con inversores rusos.