El boicot a los inversores en Barcelona pone en duda la seguridad de la Fira

El incidente hizo pasar "un mal rato" a los inversores y empresas presentes, por lo que el presidente del congreso, Juan Velayos, pidió ayer disculpas. A la vez, lanzó un mensaje muy duro contra las instituciones políticas por dar la espalda a un evento clave para la economía de la ciudad.

Panel sobre centros de datos en The District de Barcelona Faltaban efectivos en el interior

Por su parte, Albert Planas, responsable de la empresa organizadora, destacó la seguridad extrema en el exterior, cuyo dispositivo policial fue "adecuado" y fruto de la "coordinación con Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana durante semanas".

"Lo que no pensábamos es que la manifestación encontraría una brecha en la seguridad de la Fira", lamentó, apuntando a un fallo en la vigilancia privada de la institución. En este sentido, recordó que los Mossos tuvieron que hacerse con más dotaciones para desalojar a los grupos más radicales que no quisieron abandonar las instalaciones en un primer momento.

Los radicales, en el interior de la feria The District en Fira de Barcelona / CG

"Fallo total de seguridad"

Fuentes cercanas al dispositivo de seguridad de Fira hablan de "fallo total del departamento de Seguridad", que "tiene que realizar los análisis correspondientes del perfil de personas que pueden ocupar" un evento de estas características con tal de evitar "estos sabotajes". El mismo interlocutor culpa también, aunque en menor medida, a Mossos por no dar "la información suficiente".

Los portavoces de la Fira de Barcelona han asegurado a Crónica Global que cumplieron "todas las medidas de seguridad establecidas" en el momento de la irrupción de los manifestantes en el recinto. "El dispositivo fue coordinado con los Mossos, como hacemos con otros salones en los que puede haber riesgos", apostillan sobre este incidente que ha enturbiado la imagen de Barcelona como sede de un congreso todavía incipiente y cuya primera edición ha sido por lo demás exitosa.