Inspección sanciona de nuevo a Ambulancias Egara en Aragón

Inspección de Trabajo ha iniciado otro expediente sancionador contra la unión temporal de empresas (UTE) que rige Ambulancias Egara en Aragón. La autoridad laboral ha incoado otro procedimiento de castigo contra la alianza por pagar tarde de nuevo las nóminas de los más de 4000 trabajadores. 

Una ambulancia de Transalud, la UTE de Egara en Aragón / Cedida

En una resolución de Inspección de la provincia de Huesca a la que ha accedido este medio, el técnico inicia "procedimiento sancionador" contra Transalud, la UTE que forman Egara y Ambulancias Maiz en la comunidad autónoma. Se sustenta en el "retraso en el pago de salarios del mes de julio de 2022, apreciándose reincidencia". 

Segunda vez

La noticia es recurrente, porque Egara ya había sido sancionada anteriormente en Aragón por incumplimiento en el deber de pagar salarios en tiempo y forma. 

Como explicó este medio, los retrasos se deben a la pugna que mantiene la compañía catalana con Maiz en el territorio. La disputa se envenenó cuando Egara tomó el poder en el consejo de la unión de empresas con Fernando Izagirre, el expresidente de DYA Vizcaya e imputado por el presunto saqueo de la oenegé, desplazando a su socia. 

Crecimiento

El contexto del conflicto es la expansión de Ambulancias Egara más allá de Cataluña. Cabe recordar que la transportista egarense ha tratado de meter un pie en Aragón y Andorra. Tanto en la autonomía como en el país pirenaico se ha encontrado con problemas laborales. 

Ahora, la enseña busca también algunos lotes de la macrolicitación del transporte sanitario en Castilla y León, que tiene un presupuesto global de 737 millones de euros. 

Los hombres de David Madí

Esta expansión llega después de que directivos del entorno del empresario independentista y ex secretario de Comunicación del Govern con CiU, David Madí, tomaran el control de Egara, que antes de ello era una empresa familiar dirigida por la familia Simón. 

Fernando Henar (i), el hombre de Egara en Aragón; una ambulancia de la UTE y David Madí (d) / CG

El movimiento contó con el plácet de la Consejería catalana de Salud, que en el momento del cambio de dueños estaba regida por Junts pel Sí, partido heredero de los convergentes, como relató Crónica Global.