Es la madeja de la pata catalana del caso DYA, explicada punto a punto. Empresarios del sector de las ambulancias ilustran cómo Fernando Izagirre, cerebro del supuesto saqueo de la oenegé vasca, entró en contacto con directivos del sector del juego catalán, vinculados en su día a la empresa Cirsa. Fue, como ha explicado este medio, a través de Ambulancias Egara. La empresa era socia de una filial de la organización de ayuda en carretera DYA a la que se vinculó el exalto cargo del PNV que fue destituido por supuesta malversación.
Crónica Global ya detalló que los efectos en Cataluña de la presunta malversación vasca se fraguaron a mediados de la primera década de este siglo. Fue entonces cuando el Govern renovó el macroconcurso de transporte sanitario. Fernando Izagirre, político jeltzale que por aquel entonces ya era alto cargo de la DYA de Vizcaya, puso sus ojos en esta licitación. Para ganarla entró en contacto con Ambulancias Barcelona, una firma sanitaria minúscula arraigada en Cataluña.
Concurso sin éxito
Ambulancias Barcelona la dirigía entonces Joan Diego Gallardo, un directivo del sector de la seguridad a quien se vincula con la extinta Convergència (CDC) y que hasta sonó para conseller. Izagirre y Gallardo confluyeron y crearon Emergencias Plus para acudir al concurso. Esta firma producto de la fusión de la DYA y Ambulancias Barcelona tenía como objetivo ganar lotes en la macroadjudicación, pero también fraguar un gran grupo empresarial de emergencias vasco-catalán. El propio Gallardo ha recordado a Crónica Global que “quién mejor que la DYA”, una oenegé, para aportar experiencia a este conglomerado. El modelo a seguir era la rama empresarial de Cruz Roja, Transport Sanitari de Catalunya (TSC), que el grupo filantrópico creó para ir a los concursos públicos, pero que terminó vendida a la familia Bonomi, propietarios de PortAventura World.
Lo inesperado es que perdieron el concurso. Emergencias Plus no logró adjudicarse lotes y dejó de tener sentido. Se trataba de “una sociedad instrumental” para acudir a la licitación catalana.
Compran Can Padró
Tras el pinchazo en el concurso sanitario, Izagirre y Gallardo vieron otra oportunidad: Can Padró. Emergencias Plus entró a gestionar el macrorrecinto de formación en emergencias que está situado en Sant Vicenç de Castellet (Barcelona), tal y como relata el propio ejecutivo. Para explotarlo, crearon otra filial: Global Formación Plus SL.
La mercantil se dedicó a impulsar las instalaciones hasta convertirlas en un centro clínico pionero en Europa. “Hay pocas instalaciones análogas en Europa para formar a policías, bomberos y trabajadores del transporte sanitario”, subrayan fuentes del sector.
Presuntas 'lavadoras'
Izagirre y Gallardo gestionaron juntos Can Padró hasta “los años 2012 o 2013”, rememora el segundo, ahora afincado en Andorra. Poco después, el primero compró al catalán su participación y este “salió” del negocio. Es en aquel momento cuando se sospecha --lo cree la actual junta de la DYA y la Fiscalía-- que el peneuvista utilizó las dos sociedades catalanas para saquear la oenegé que presidía.
Emergencias Plus y Global Formación Plus están en la diana del caso DYA en el País Vasco, por bien que están domiciliadas en Cataluña.
Entra Egara
El paso del directivo vasco por Cataluña tiene más derivadas. El grupo catalán Ambulancias Egara había comprado Emergencias Plus en 2010. Egara es una empresa afincada en Terrassa (Barcelona) y que pertenece a la histórica familia Simón. Se la vincula a CDC porque fue uno de los donantes de la Fundación CatDem, el extinto think thank de los convergentes que vehiculó las aportaciones de privados al partido de Jordi Pujol.
¿Cómo fue la llegada de Egara a la firma de Izagirre y Gallardo? Directivos del sector han precisado que la egarense adquirió la unidad de negocio de Emergencias Plus, quedándose los vehículos, clientes y un tráiler que terminó en Ambunova, en Galicia. Quien facilitó el contacto de los Simón con Izagirre fue Gallardo, en aquel momento aún socio del concejal del PNV en Galdácano (Vizcaya).
David Madí y el CEO de Benito Arnó
Según las fuentes consultadas, la operación tuvo más enjundia. No solo entró Ambulancias Egara en Can Padró con Emergencias Plus, explicó El Triangle, sino que se dio paso a una constructora leridana vinculada a los egarenses: Benito Arnó.
El hombre que trajo a la firma del ladrillo habría sido David Madí, empresario y exsecretario de comunicación de CDC. Juan Diego Gallardo contactó con Oscar Simón, gerente de Egara. Este se habría reunido, a su vez, con Madí, detallan fuentes conocedoras de los contactos. A renglón seguido, el ex alto cargo convergente habría introducido en la operación a Joan Albert Arqués, director general de Benito Arnó.
Madí y Arqués, socios
El hecho de que Madí hiciera de cicerone del empresario leridano no es casualidad. El directivo, aún imputado en la operación Voloh, comparte intereses con Arqués en varias sociedades. Entre ellas, la inversora Icat Desenvolupament o las sociedades Cruañas y Asociados Consejeros, Valldeboí 1900 y Vanture ESS.
Arqués, “que tenía línea directa con el president Artur Mas”, destacan las voces consultadas, no entró en persona en el negocio de las emergencias. Designó a un tercero.
Llega el entorno de Cirsa
Es en este punto cuando la pata catalana del caso DYA vasco se acerca al entorno de Manuel Lao, fundador y expropietario de Cirsa. El CEO de Benito Arnó, Joan Albert Arqués, designó a un hombre de confianza para dirigir Ambulancias Egara: Fermí Ferran Calzada. Ferran había sido director de seguridad de Cirsa.
Se desvinculó de la firma de juego en 2004, como admite él mismo, aunque antes ocupó posiciones de “mucha responsabilidad” en la compañía. ¿Sigue vinculado a los antiguos propietarios? “Como vecinos en Matadepera (Barcelona) y como amigos, aunque no como socios”, matiza a Crónica Global. Desde el entorno de Lao, a su vez, descartan tener participación alguna en Ambulancias Egara. Pero lo cierto es que el ex de Cirsa se acercó a Fernando Izagirre, el político nacionalista vasco quien por aquel entonces seguía en la gestión de Can Padró tras romper con Gallardo.
A la caza de Aragón
Ferran, de forma razonable por su doble posición en ambas firmas, acercó Egara a Benito Arnó --las dos compañías comparten auditores y abogados en la figura de RCM--. Y captó a más directivos del juego. Uno de ellos fue Álex García Gascón, otro ex de Cirsa que había pasado también por el FC Barcelona como jefe de control de riesgos. Llegó a Ambulancias Egara en 2016, algo que ya explicó este medio.
Con su nuevo equipo, Ferran pergeñó más negocios junto a Fernando Izagirre, su nuevo socio. Niega haber comprado formalmente Can Padró, aunque otras voces del sector lo dan por hecho. Tampoco ha desmentido lo publicado por El Triangle. Lo factual es que Egara y una filial de la DYA de Vizcaya, Ambulancias Maiz, otearon a más negocios y, finalmente, acudieron juntas a otro concurso de transporte sanitario: el de Aragón.
Bronca en Zaragoza
En esta región, Egara (Ferran) y Maiz (Izagirre) ganaron el contrato de transporte sanitario no urgente por 42,5 millones de euros a seis años en UTE. El ex de Cirsa puso al mando de la UTE a otro polémico directivo vinculado con el gigante español del juego: Fernando Henar. Henar había sido director de la División de Bingos de Cirsa. Y presidente de la patronal CEJ del bingo.
Pero esa designación no sentó bien. “Henar sabe mucho de juego, pero nada de ambulancias”, relatan hoy fuentes conocedoras de aquellos hechos. La UTE de Aragón implosionó y Ambulancias Egara y Maiz iniciaron una inédita guerra interna –que detalló Crónica Global-- en la que está teniendo que mediar el Gobierno de Aragón. Fermí Ferran denuncia que sus socios “han dejado de pagar tres nóminas” y ha tenido que ser la egarense quien las abone. El caso se ha judicializado.
Imputado por el 3%
Su rival, por el contrario, prefiere no hacer comentarios sobre el caso. Con todo, directivos cercanos a Maiz lamentan que “ejecutivos del juego catalán sin experiencia en el transporte sanitario hayan desembarcado en la industria, contaminándola de otros intereses”. ¿Cuáles son esos intereses? "Los de la galaxia del juego", destacan. Más allá de esta cuestión, la socia de Egara pasó de la órbita de Fernando Izagirre (DYA Vizcaya) a otro equipo de gestión: el de Fermí Ferran. Y entonces empezaron los problemas con su partner en Aragón.
Volviendo a Izagirre, el factótum de la DYA Vizcaya ha terminado investigado y, por ello, cesado como director de Emergencias del Gobierno vasco después de que una nueva junta lo apee de la dirección de la oenegé. Su exsocio Joan Dídac Gallardo asegura haberse desvinculado de la pata catalana y reside en Andorra, no sin antes haber sonado como consejero catalán de Interior con el expresident Artur Mas.
¿Cuánto manda Fermí Ferran?
Por su parte, Joan Albert Arqués, el hombre último tras Ambulancias Egara, está investigado en el caso 3% de presunta financiación ilegal de CDC. David Madí, imputado en el caso Voloh. Óscar Simón continúa como gerente de Egara, aunque las fuentes consultadas lo sitúan como hombre de paja de Fermí Ferran, a quien señalan como conseguidor de Arqués.
El que fuera todopoderoso director de seguridad de Cirsa es el nombre clave en la pata catalana del caso DYA, aunque él rechaza cualquier proximidad y atribuye los vínculos con Izagirre a legítimos negocios que hicieron juntos como el de la UTE de Aragón.
Aviso aclaratorio: Esta información ha recibido una solicitud de rectificación de Ivemon Ambulancias Egara