El emprendedor Pep Gómez ha vendido Reby por 100 millones de dólares (unos 95 millones de euros). La firma de patinetes eléctricos de alquiler, que se ha encontrado en Barcelona con las trabas del ayuntamiento de Ada Colau, ha generado un interés notable por parte de un fondo canadiense de capital inversión, House of Lithium.
No es la primera startup de éxito impulsada por el empresario catalán, uno de los 30 jóvenes españoles más influyentes según Forbes. Cuando tenía solo 19 años, fundó la plataforma de alternativas de ocio Fever, que se convirtió en un unicornio valorado en 1.000 millones de euros tras una inversión de Goldman Sachs.
Despliegue en España e Italia
Gómez fundó Reby en 2018 junto a Kiran Thomas, Cristina Castillo y Guillem Pagès. La firma desplegó una flota de motos eléctricas en Zaragoza en plena pandemia y ha alcanzado 18 acuerdos de movilidad sostenible con Administraciones públicas en Italia y España.
Sin embargo, la startup ha pasado relativamente desapercibida en el mercado europeo en comparación con otros operadores como Bolt, Voi y Tier, lo que no le ha impedido lograr licencias municipales claves en su mercado.
14 millones en ingresos
La compañía ya ha levantado 17 millones de euros en rondas de múltiples inversores y cuenta con unos ingresos anuales de unos 14 millones de euros y un ebitda de casi tres millones. Su apuesta pasa por los vehículos de fabricación propia en vez de manufactureros chinos y las licencias municipales de exclusividad.
Con la entrada del fondo canadiense presidido por Kevin Taylor, que invierte en empresas del sector de la movilidad eléctrica, Reby espera poder impulsar sus esfuerzos en cuanto a regulación de infraestrictiras, innovación en seguridad y el reordenamiento de la ocupación de los espacios públicos urbanos.