Nuevas curvas tras el Brexit: alarma en las empresas expuestas a Reino Unido

El mensaje lanzado por el organismo emisor, tras decretar la cuarta subida consecutiva de tipos de interés en el país, repercutió negativamente en las cotizaciones de algunas de las grandes empresas españolas con destacada presencia en el mercado británico como Santander, Banco Sabadell e Iberdrola. 

Brusco cambio de trayectoria

Las dos entidades financieras fueron dos de los cuatro valores más penalizados de la sesión, con descensos del 3,5% para el Sabadell y del 3% para la entidad que preside Ana Botín, cuyo comportamiento fue especialmente significativo, ya que poco antes de conocerse los detalles del mensaje del Banco de Inglaterra cotizaba con moderadas alzas. 

La sede corporativa de Banco Sabadell en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) / EP

En el caso del Sabadell, el valor ahondó en los descensos que ya acumulaba desde el inicio de la sesión, aunque éstos no superaban al punto porcentual antes de la comunicación del emisor británico. Iberdrola, por su parte, prolongó su caída hasta el 1,6% y también figuró entre los más castigados de la jornada.

Disensiones

Al margen de la subida del precio oficial del dinero, ampliamente descontada por el mercado, lo que ha puesto en alerta a empresas e inversores ha sido tanto el pronóstico de la entidad como la división interna en su consejo de gobierno a la hora de determinar la cuantía de la subida.

Lejos de la unanimidad, el resultado de la votación fue de seis a tres; los miembros que quedaron en minoría eran partidarios de una subida de tipos incluso mayor, de 50 puntos básicos, como la que el miércoles adoptó la Reserva Federal de EEUU.

Inflación prolongada 

Pero además, el Banco de Inglaterra advirtió de que proseguirá con este ritmo en su política monetaria ante unas previsiones que apuntan a que la inflación podría alcanzar los dos dígitos en los próximos meses, principalmente por la subida de los precios de la energía y de las materias primas.

Para completar su pronóstico, la entidad habla ya abiertamente de una posible contracción económica hacia el final de año si esta situación no se corrige, algo que en la actualidad parece complicado dado que el conflicto bélico en Ucrania no tiene visos de estar cerca de su fin. Es más, las informaciones apuntan a que el Gobierno ruso podría declarar oficialmente la situación de guerra en los próximos días.

Tensión en torno al crudo 

Mientras, las anunciadas nuevas sanciones de la Unión Europea, con un progresivo veto a la compra de petróleo en Rusia que se completaría a finales de año, ha elevado la tensión en los mercados de materias primas y ha situado al barril de crudo de nuevo por encima de la cota de 110 dólares.

Tanto Santander como Banco Sabadell cuentan con una presencia destacada en Reino Unido; en el caso del primero, el británico figura entre sus principales mercados desde comienzos de este siglo tras la compra de Abbey National.

La aportación de TSB

Mientras, la entidad que preside Josep Oliu adquirió TSB en 2015 y, tras una larga travesía en el desierto debido a un proceso de integración con numerosos problemas y el impacto negativo del Brexit, el banco británico ha empezado a dar alegrías a su matriz gracias a su potente producción hipotecaria, que se ve precisamente beneficiada por el alza de tipos. Los últimos resultados del Sabadell incluyen una aportación al beneficio por parte de TSB de algo más del 20%.

En el caso de Iberdrola, Reino Unido es uno de sus cinco grandes mercados desde mediados de la primera década del siglo, cuando adquirió la mayoría de Scottish Power, que ha convertido en punta de lanza de su apuesta por la energía verde en el país tras deshacerse de forma progresiva de sus activos de generación tradicional.  

Del optimismo a la incertidumbre

Del mismo modo que fue el primero de los grandes bancos centrales en iniciar la subida de los tipos de interés, el Banco de Inglaterra también ha sido el primero en atreverse a hablar de una posible contracción en el crecimiento derivada de las tensiones inflacionistas. 

Al contrario, apenas unas horas antes la Reserva Federal de EEUU había incluso insuflado optimismo entre los inversores al elevar medio punto los tipos de interés y adelantar nuevas alzas de este calibre en sus próximas reuniones. 

Caída del PIB de EEUU

El mensaje de la Fed alejaba los pronósticos más pesimistas, que apuntaban a subidas más drásticas, hasta de 75 puntos básicos como medida para combatir la inflación. De hecho, la respuesta de Wall Street no se hizo esperar y los principales indicadores de la Bolsa de Nueva York cerraron la jornada del miércoles con notables avances, superiores al 2%.

Cabe recordar que la economía estadounidense experimentó un retroceso del 1,4% en el primer trimestre de 2022, de acuerdo con la primera estimación del Departamento de Comercio, penalizada por los elevados precios y las consecuencias de la guerra en Ucrania.