Veritas celebra su 20 aniversario con la vocación de crear un impacto ecológico en Cataluña y el resto de España. La cadena de supermercados ha logrado alcanzar una cuota de mercado eco en la comunidad del 25%, es decir, por cada 100 productos 25 son comprados en sus tiendas. En el resto del Estado el porcentaje desciende hasta el 9,8%.
La historia del conglomerado catalán se inicia en 2002 con su primera tienda en Sarrià (Barcelona), que se suma a las prácticamente 80 que tiene en toda España 20 años después. Veritas llegó a un acuerdo con Ecorganic en la Comunidad Valenciana, marca con la que opera indistintamente en ese territorio, mientras el resto de establecimientos llevan el nombre de la compañía barcelonesa en Cataluña, el País Vasco, Navarra, las Islas Baleares, Madrid y Andorra.
Distribución desde Lliçà d’Amunt
La cadena ha presentado en el año que cumple dos décadas de vida su planta logística y de producción en Lliçà d’Amunt (Barcelona), aunque ya comenzó a funcionar en 2016. Con 10.000 metros cuadrados y una inversión de cuatro millones de euros, es el principal centro de distribución de las tiendas Veritas de toda España. Cuenta con más de 4.000 referencias ecológicas y ha sido reformada con un obrador artesanal de grandes dimensiones y la Cuina Veritas, que utilizan para reaprovechar los productos o sobrantes en la elaboración de algunos artículos.
Este ciclo de reaprovechamiento, junto a los productos de proximidad, son algunos de los factores por los que el grupo alimentario se ha visto poco afectado por la crisis derivada de la invasión rusa. “No tenemos problemas de abastecimiento --en referencia a la huelga de transportistas-- ni de materias primas, la guerra en Ucrania tan solo ha provocado un aumento del precio del carburante, por lo que se han incrementado los costes del transporte”, ha explicado Silvio Elías, consejero delegado de Veritas.
Crecimiento sostenido, con poco margen
En los dos últimos ejercicios registrados, la cadena de supermercados experimentó un crecimiento del 8% en 2020 --algo más de 200 millones de euros-- y de otro 1,2% en 2021 --alrededor de 108 millones--. La “venta atípica” del primer año de pandemia, según ha expresado Elías, consolidó el producto ecológico en el mercado catalán. No obstante, aunque la progresión de la tienda online ha sido positiva durante los meses más duros del Covid-19, tan solo supone el 3% de toda la facturación del grupo.
“Sí ganamos dinero, tenemos un ebitda muy sano”, ha señalado Elías. Veritas mantiene unos márgenes bastante reducidos en lo que se refiere al coste de producción y al precio final de venta. Algo que se basa, según el consejero delegado, en la “vocación de la compañía por acercar la salud a las personas y protagonizar el cambio de mentalidad hacia el producto ecológico”.
Nuevas aperturas ‘pure’ ecológico
“Abriremos cinco o seis tiendas más en 2022 y cerraremos dos que se han quedado pequeñas y no cumplen los servicios mínimos que ahora requerimos”, ha aseverado el directivo. Esto supone una expansión moderada que se realiza en la línea que Veritas ha seguido en los últimos años. Los dos establecimientos abiertos este primer trimestre están en Sant Joan (Alicante) y Palma de Mallorca.
Elías ha ensalzado la importancia del sello BCorp, que es el reconocimiento europeo a las empresas que generan un cambio positivo en la sociedad y el planeta. Lo obtuvo en 2016, siendo la primera cadena ecológica del contienente en conseguirlo. “Muchos supermercados utilizan como gancho el producto ecológico, pero nosotros tenemos certificados todos los productos y no vendemos los que no son ecológicos. Por eso no tenemos naranjas en agosto y septiembre, están fuera de temporada”, ha sentenciado el consejero delegado de Veritas.