Si en la jornada inaugural del Mobile World Congress (MWC) fue José María Álvarez-Pallete quien pidió las mismas reglas para las telecos y las plataformas de contenidos, este miércoles ha sido José Ignacio Goirigolzarri quien ha reclamado un marco regulatorio compartido para la banca y el negocio cripto.
El presidente de Caixabank ha celebrado la emergencia de nuevos players financieros, pero ha subrayado que "las regulaciones juegan un papel fundamental en este campo". "La regulación es una fuente de estabilidad para el sistema en su conjunto", ha añadido.
Regular los criptoactivos
Por eso, el directivo ha enfatizado que "las reglas deben ser coherentes para todos los actores que prestan la misma actividad: me refiero a la aparición de divisas y activos digitales". Goirigolzarri ha reconocido que los recién llegados a la actividad financiera han desarrollado servicios y soluciones "valiosos" a los que la banca tradicional debe atender "con ambición y humildad".
Pero ha reivindicado el esfuerzo del negocio financiero convencional por subirse al tren de la transformación tecnológica. E incluso ha subrayado que "la relación estrecha de confianza con los consumidores" de la banca puede favorecer positivamente este propósito.
Límites de la digitalización
Por otro lado, el presidente de Caixabank ha aseverado que el ritmo de la digitalización debe modularse en función de las necesidades de cada cliente. De hecho, ha detallado que los clientes de 30 años usan canales virtuales el 80% de veces que operan con la entidad, pero este porcentaje cae hasta el 25% entre los usuarios mayores de 70 años.
El equilibrio entre los nuevos y los viejos modelos de distribución es uno de los desafíos más "complejos" del sector. Pero también hay otro reto que Goirigolzarri ha resumido con el concepto de "ética digital". En este punto, el directivo ha vinculado su discurso con las palabras del presidente de Telefónica del pasado lunes: "La aplicación de la tecnología tiene sus límites: la seguridad, el respeto a la privacidad y la libertad individual". Una hoja de ruta que permeará la transformación digital de la economía en los próximos años.