Aragón triplica la energía eólica de Cataluña

De hecho, fuentes consultadas por Crónica Global temen que, tras el polémico decreto sobre renovables de la consejera Teresa Jordà, la autonomía limítrofe se establezca como santuario para los grandes y pequeños promotores. "Todavía no ha habido fuga de empresas", señalan estos interlocutores, aunque apuntan que ya hay algún proyecto de capital catalán que se ha mudado a Aragón.

'Boom' renovable en Aragón

Los datos oficiales recabados por este medio son claros. Actualmente, Aragón produce 4.155 megavatios (MW) de energía eólica, frente a los 1.269 MW generados en Cataluña. La comunidad también dobla la cantidad de parques de molinos, con 149 frente a los 71 catalanes.

Actualmente, otras 121 estaciones eólicas de menos de 50 MW --aquéllas cuya aprobación está en manos de las autonomías y no del Ministerio para la Transición Ecológica-- están tramitándose en las provincias de Zaragoza, Huesca y Teruel con una capacidad total de 3.847 MW. De aprobarse todos los expedientes, la región duplicaría su potencia actual. En el capítulo fotovoltaico es donde Aragón todavía puede crecer notablemente --solo tiene enchufados 1.051 MW a la red--, aunque la Administración autonómica ya tiene sobre la mesa peticiones empresariales que suman 7.487 MW de origen solar.

La energía eólica es una de las más eficientes que existe / UNSPLASH

Excedente de energía limpia

En declaraciones para Crónica Global, el vicepresidente y consejero de industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial de Aragón, Arturo Aliaga, señala grandes operaciones como la alimentación de la alta velocidad o la electrificación de la línea Zaragoza-Teruel-Valencia. "Queremos cerrar y mallar las redes con las empresas de distribución para que no se desperdicie nuestra capacidad de energía renovable con las capacidades que tenemos magníficas de sol y de viento que no se desperdicie esta capacidad para cumplir escrupulosamente con las tramitaciones, tanto ambientales como propias de los departamentos de Industria".

Por otro lado, un portavoz del gobierno aragonés subraya que hoy en día la comunidad es la tercera en electricidad limpia en España y está entre las cinco que con excedentes renovables --esto es, genera el 120% de todo el consumo de energía eléctrica que necesitan sus empresas y hogares a través de fuentes no fósiles--. Fue en 2020 cuando el territorio dio un gran salto: en un solo año se aumentó un 41% la producción eólica y un 364% la producción fotovoltaica. Todavía aportan un último dato: en 2019 se tramitaron 2.000 MW, los mismos que en los últimos 30 años.

Denuncia de EolicCat

Todo ello mientras la ponencia de energías renovables de la Generalitat --el órgano interdepartamental que debe dar luz verde a los proyectos renovables-- lleva paralizado desde marzo. Como denunció recientemente la patronal EolicCat, el órgano frenó su actividad a la espera del cambio regulatorio que el Govern dio a conocer hace semanas. Esta parálisis ha soliviantado al sector, que ya ha sufrido una "década perdida". "Desde 2012, solo se ha instalado un único molino de 2,35 MW en la comunidad, mientras otras regiones nos han pasado por delante", explicó a este medio el gerente de la organización, Jaume Morrón.

De hecho, tanto la entidad empresarial como los promotores a título individual han amenazado con demandar a la Administración por un quebranto patrimonial que cifran en 150 millones de euros. EolicCat ha advertido, además, de que los grandes proyectos impulsados por compañías como Forestalia tendrán sus puntos de evacuación en territorio catalán. Como resultado, los ayuntamientos de Aragón se quedarán con los impuestos y empleos generados por los aerogeneradores, mientras que Cataluña deberá asumir las líneas de muy alta tensión que cruzarán la frontera para abastecer las necesidades industriales de la economía catalana. La parte del león, esta vez, quedará del otro lado del Ebro.