ASG tantea la venta del macrohotel del Port Fòrum

Han informado de ello diversas fuentes del sector inmobiliario, que han alertado de que Activum SG tantearía la venta del macrohotel, de 504 habitaciones, después de quedarse sin marca que lo explote. Preguntado por ello, el grupo de inversión con sede en la isla de Jérsey (Reino Unido) ha rechazado la información y ha subrayado que "no está en una posición vendedora". 

Encargo a JLL

El desmentido de ASG no tranquiliza al sector inmobiliario. De hecho, fuentes cualificadas precisan que el también dueño del icónico Nobu Hotel de Barcelona ha encargado a Jones Lang LaSalle que prepare la venta del Hotel del Port Fòrum. Inquirido por la cuestión, JLL ha declinado comentar sobre posibles clientes. 

Directivos del sector alojativo han confirmado las intenciones y han aportado más datos: la operación del macrohotel en la frontera norte de Barcelona se enfría por su difícil rentabilidad. No en vano, el resort reposará en el antiguo Camp de la Bóta, una zona cercana a una depuradora de aguas, la central de valorización de residuos de Tersa --denunciada a Fiscalía por contaminar--, las playas de Sant Adrià --cerradas el pasado verano por contaminación de la arena-- y la propia marina deportiva, una dársena cuyos proyectos de reactivación jamás han despegado, explicó Crónica Global. 

Venta del Hard Rock de Madrid

La posible venta del hotel del Port Fòrum, no obstante, no responde a factores locales, sino a una estrategia de la gestora de fondos de inversión. Las fuentes del sector sitúan el planteamiento de venta dentro de la estrategia de desinversión de ASG, que también quiere desprenderse del hotel Hard Rock de Madrid, como explicó Ejeprime. 

La doble venta, desmentida por la compañía en el caso de Barcelona, respondería a la situación de mercado, agregan las mismas voces. No en vano, la hotelería española suma año y medio en la atonía por la pandemia del coronavirus. En el caso de la Ciudad Condal, los alojamientos se han anotado dos veranos en mínimos históricos y temporadas bajas con el segmento corporativo (MICE, por sus siglas en inglés) deprimido. Pese a ello, el mercado apunta a una recuperación, que no será inmediata. 

Operaciones

El descalabro de la facturación ha impulsado ventas de hoteles de cadenas familiares y grandes grupos para restar inmobilizado al balance. Solo este año y como ha avanzado este medio, la familia Borrell se ha desprendido del Curio Alexandra por 32 millones; Jordi Mestre ha vendido Selenta Group a Brookfield por 440 millones de euros; Unico Hotels ha dejado ir el Grand Hotel Central por 93 millones; Meliá ha comprado el Tryp por 90 millones y NH ha cerrado la venta del Calderón por 125 millones. 

Sobre la bocina del cambio de año, Selenta ya colocó el celebrado Nobu hotel a, precisamente, Activum SG. El gestor de fondos pagó cerca de 80 millones por el rascacielos, que otea a la Estación de Sants. Tras ello, el vehículo inversor avanzó que busca redoblar su compromiso con la Ciudad Condal. La operación del Port Fòrum, si cuaja, sería pues una excepción en una estrategia de crecimiento en la capital catalana.