La reciente salida de 1.800 personas de la plantilla podría no ser el último ajuste de Banco Sabadell en el corto o medio plazo. La entidad, que ultima el plan que guiará su camino en los próximos años, considera que aún puede ser más eficiente en costes, especialmente en el sector de banca de particulares, con lo que no descarta nuevas medidas en este sentido.
Sin hacer una mención explícita a nuevos planes de ajustes laborales, el consejero delegado del grupo, César González-Bueno, se ha estrenado en las lides de la presentación de resultados ante los medios con una radiografía muy esquemática de la situación del banco. En ella, ha dejado claro que existe un amplio “margen de mejora en banca de particulares, sobre todo en costes”.
Cambio de hábitos
A preguntas de los periodistas, el ejecutivo ha recordado que “ha habido un cambio en los hábitos de consumo; los clientes nos demandan menores precios, como consecuencia de la creciente competencia, y al mismo tiempo recurren cada vez menos a determinados servicios del banco”. Una referencia clara de la actividad en las sucursales.
Banco Sabadell presentará el próximo 28 de mayo a los mercados el nuevo plan estratégico, diseñado ya bajo la dirección de González-Bueno. En esta hoja de ruta podrían darse más detalles sobre un hipotético ajuste o sobre las medidas a llevar a cabo para la contención de costes.
Un problema estructural
“No hay ahora mismo una guía", ha puntualizado el ejecutivo. Con todo, advierte que el grupo financiero tiene "claro que se han convertido en un problema estructural y que necesitamos seguir ajustándolos”.
En los últimos días se han conocido notables recortes de empleo y cierres de sucursales por parte de Caixabank y BBVA. Ambos banco están inmersos en la negociación con los sindicatos, mientras que Santander alcanzó ya un acuerdo para ejecutar su propio plan de ajustes. En todos los casos, la creciente actividad comercial por canales digitales, en detrimento de la presencial en oficinas y el complicado entorno de tipos negativos y creciente competencia desde el ámbito tecnológico, han sido los motivos esgrimidos para justificar estas decisiones.
Por qué no se vende TSB
En referencia a la cuenta de resultados, González-Bueno ha valorado de forma especial la entrada en el terreno de la rentabilidad de TSB, la filial británica del banco que generó un agujero destacado en las cuentas del banco por los errores en la migración de plataforma tecnológica tras su adquisición. A marzo de 2021, la firma cerró el primer trimestre con beneficios de dos millones de euros.
En este sentido, el ejecutivo ha justificado la decisión del consejo de revocar la intención original de poner a la venta la entidad adquirida en 2015. “Por el esfuerzo que está haciendo; cuenta con una buena marca, una franquicia en hipotecas notable y una estructura de costes sana”, ha señalado.
Mandato de seguir en solitario
González-Bueno ha recordado que conoce bien TSB porque formó parte de su consejo de administración durante un año. “Tiene buena pinta “, ha resumido.
Del mismo modo, también se ha mostrado convencido de que Banco Sabadell puede afrontar el futuro en solitario, sin necesidad de acometer una operación corporativa como la que estuvo a punto de ejecutar con BBVA. “Ése es el mandato que tenemos del consejo de administración y hemos visto que es posible ejecutarlo”, ha sentenciado ante la prensa.
Consistencia
“Este banco tiene sustratos muy fuertes, nuestros resultados antes de provisiones no tienen nada que envidiar al resto”, ha añadido. No esconde la complejidad de las operaciones de fusión, especialmente las transfronterizas que tanto desea el Banco Central Europeo (BCE), pero, por ahora, el Sabadell no es un player.
González-Bueno ha tenido palabras de elogio para los componentes de los diferentes equipos del banco, “que me han demostrado una gran capacidad de resistencia y de adaptación”. Ha sido el guiño que ha querido lanzar al equipo que le ha recibido para ebrir una nueva etapa en la entidad.