La regulación de las casas de apuestas y su publicidad ya se cuece en el horno y Josep Pedrerol se frota las manos. El ministro de Consumo, Alberto Garzón, tiene el beneplácito de Bruselas para tener antes de octubre el nuevo Decreto que limitará los anuncios del sector de madrugada, mismo horario en que se emite el programa del periodista.
Así, El Chiringuito de Jugones, liderado por el famoso comunicador catalán, es el único espacio informativo en el que el sector podría publicitarse y recibir alguna cuantía económica de los 80 millones del total que utiliza el Juego en concepto de márketing en España.
Se ultima el Decreto
Este mismo viernes, el ministro anunció que ya trabaja para que el Consejo de Ministros apruebe en octubre el Real Decreto de Comunicaciones Comerciales de la Actividad del Juego.
La limitación que propone el Gobierno contra la publicidad va hasta cualquier espacio público, estadios y camisetas de los clubes, tal y como contó este medio cuando tuvo acceso al borrador del nuevo Decreto. Esta legislación impactará de lleno en las arcas de los propios equipos, medios de comunicación o empresas de márketing ya que reciben una importante inyección económica por ofrecer, casi en tiempo real, las cuotas de los eventos deportivos.
Bombardeo de anuncios
Hasta el anuncio de las restricciones, 19 de los 20 equipos de La Liga, con excepción de la Real Sociedad (por decisión de sus socios), mantenían acuerdos con alguna de las firmas del sector como Bet365, Betway, Bwin, Codere o Sportium.
En el caso de las televisiones, periódicos y radios el caso es mucho más flagrante. Todos los espacios deportivos que se emiten en las ondas, internet o papel contienen publicidad de casas de apuestas. Y todos ellos quedarían relegados a no recibir ni un solo euro, bien porque estarían dentro del horario protegido, o porque se restringe el canal de emisión en el nuevo Decreto.
Pedrerol, la única salvación
En este contexto, la famosa tertulia de El Chiringuito de Jugones se atisba como la única solución para las casas de apuestas. Si bien es cierto que su emisión comienza a partir de las doce de la noche (de domingo a jueves), las polémicas discusiones de Pedrerol y sus contertulios se alarga más allá de las dos y media de la madrugada, dejando un espacio de una hora y media para que el sector del juego pueda llamar a la puerta del programa del periodista catalán y publicitarse.
Además, hay otro factor que ayuda al espacio de Atresmedia: su audiencia. No es raro ver que al principio, en mitad o al final del programa, Josep Pedrerol pronuncie el famoso “líderes esta noche”. Y razón, no le falta. Su share en pantalla suele estar en torno al 8%, con casi medio millón de televidentes, a pesar de emitirse de madrugada.
Sin oposición
Como se mencionaba anteriormente, los horarios restrictivos que propone Garzón dejan a los programas deportivos sin opción al pastel de 80 millones de euros que reparte el sector del juego cada temporada. Las tertulias de radio adelantaron su inicio de emisión hace tres años en plena guerra de audiencias. Así, El Transistor de Onda Cero, El Larguero de Cadena Ser y El Partidazo de Cope comienzan a las once y media de la noche y finalizan a la una y media de la madrugada. Es decir, el sector tiene apenas media hora para publicitarse en cada uno de los espacios.
En televisión, la situación es mucho mejor para los intereses económicos de Pedrerol. Tan solo hay un programa similar a El Chiringuito. Ese es Estudio Estadio, dirigido por Juan Carlos Rivero, que tampoco será rival para el espacio presentado por el comunicador. Además de empezar media hora antes, el hecho de que la tertulia se emita en RTVE y no pueda recibir dinero por publicidad deja como una única opción a uno de los buques insignia de Atresmedia.
Situación precaria y despidos
Fuentes del sector apuntan a Crónica Global que la nueva regulación provocará “despidos en los medios de comunicación y programas deportivos” puesto que el dinero del sector del juego es “muy importante” para su supervivencia. Además, consideran que los contratos de trabajo de nuevos periodistas serán “aún más precarios” que los que hay en la actualidad.
Las mismas fuentes no entienden la postura de Consumo puesto que consideran que cumplen la reglamentación “como otro sector cualquiera” y auguran un “paro elevado” en las empresas que “viven indirectamente” de los deportes.