Sergi Loughney, nuevo director del Palau Macaya

Un cambio para afrontar una etapa más ambiciosa, al frente del Palau Macaya. La Fundación Bancaria La Caixa ha decidido la incorporación de Sergi Loughney como director de Prospectiva, Reflexión y Palau Macaya, una institución que se ha convertido en los últimos años en un referente de la reflexión intelectual y del pensamiento en Barcelona.

Loughney (Barcelona, 1962) asume la nueva responsabilidad después de haber ejercido como Director de Comunicación y de Reputación Corporativa en Abertis. También había estado al frente de la Fundación Abertis desde 2007.

Un hervidero de ideas y proyectos

En esta nueva etapa Sergi Loughney dependerá de Presidencia y de Secretaría General de la Fundación Bancaria La Caixa, sustituyendo al frente del Palau Macaya a Josep Ollé.

El Palau Macaya se ha convertido en los últimos meses en un hervidero de iniciativas. En su sede, en el Paseo Sant Joan, conviven los proyectos de la Escuela Europea de Humanidades (EEH), que coorganiza el equipo de La Maleta de Portbou, que dirige el filósofo Josep Ramoneda; el Club de Roma, que preside Lanaspa, y ha sido el espacio que ha albergado diferentes debates sobre el futuro del catalanismo, y de entidades como Treva i Pau.

En los gobiernos de Jordi Pujol

El que será en pocas fechas el nuevo director del Palau Macaya tiene una amplia trayectoria en el campo de las relaciones institucionales. Antes de su paso por Abertis, fue el director de Relaciones Institucionales y de Comunicación del grupo Peralada. Justo antes de esa responsabilidad, ejerció el cargo de jefe de Protocolo y Relaciones Externas en el Departamento de la Generalitat, en los gobiernos de Jordi Pujol.

Gran aficionado al rugby, Sergi Loughney fue jugador internacional durante diez años y capitán de la Selección española.

Ocho años de reflexión y debate

El Palau Macaya de la Caixa cumple ya ocho años como espacio de diálogo y reflexión. No se trata de un think tank, sino de un espacio de divulgación, con debates que se han centrado en la renta básica universal, en el envejecimiento de la población, pero también en los nuevos fenómenos políticos como el populismo. El edificio fue concebido por el arquitecto Josep Puig i Cadafalch, a partir del encargo del industrial Román Macaya. Tras los desperfectos que sufrió durante la guerra civil, fue adquirido por La Caixa, que albergó diferentes servicios, desde el Instituto Educativo de Sordomudos y Ciegos hasta el Centro Cultural de la Fundació La Caixa, que albergó durante años importantes exposiciones.

En 2012, el presidente de la La Caixa, Isidro Fainé inspiró un cambio en el uso, para convertirse en un espacio de reflexión y debate, que ha cobrado un enorme vigor en los últimos meses, en los que la sociedad catalana ha comenzado a repensar su futuro, desde todos los ámbitos.