El mal estado del mar provocado por los efectos de la borrasca Elsa se están dejando notar en España, especialmente en Galicia. Además de los estragos meteorológicos, el temporal está provocando la escasez de marisco y pescado en unas fechas en las que el consumo aumenta de manera sobresaliente con la llegada de la Navidad.
El fenómeno meteorológico está disparando los precios de estos productos. Y es que las malas condiciones marítimas impiden a los pescadores faenar y por lo tanto las capturas bajan y provocan ese encarecimiento de los productos marinos.
El centollo, lo más caro
Desde la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Pontevedra apuntan a que escasean “sobre todo los centollos, pero también los percebes y hay menos langostinos”, lo que ha llevado a aumentos en los precios de “hasta el 30% por encima de la media de estas fechas”, que llegan a ser de “hasta del 60%” si se comparan con lo que se pagaba el pasado año.
Es una tendencia, afirman desde la cofradía pontevedresa, que “ya viene dándose desde hace varias semanas”, porque “la gente empieza a comprar todo lo necesario para Navidad mucho antes”. Ese hecho ha provocado igualmente que apenas hayan podido realizarse reservas de productos marinos en las lonjas, simplemente porque no había y las previsiones de tenerlo tampoco eran optimistas, otra razón para que hayan subido los precios.
Cuando más demanda hay
Los pescadores gallegos se quejan de que el temporal “haya entrado en estas fechas”, cuando más demanda tienen, porque han perdido demasiados días de trabajo y por mucho que pudieran tratar de recuperarlos tras el paso de Elsa, ya sería tarde y no podrían abastecer a los comercios con normalidad.
Los centollos y los percebes son los productos más demandados estas fechas y los que mayores márgenes dejan a quienes los capturan, por eso son precisamente los que más escasean. “Son nuestra principal fuente de ingresos en diciembre”, aseguran los pescadores, que en el caso del centollo afirman que los precios son ahora "el 60% más caros que en 2018", y “hasta un 30% los percebes”, pero también se han visto muy afectados la nécora y el buey de mar: “En general hay menos de todo”.
"No es demasiado alarmante"
Al margen de que sea “normal” que los precios suban en estas fechas de más demanda, “es evidente que hay menos capturas y menos producto en las tiendas”. En todo caso, desde la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Pontevedra señalan que están “acostumbrados” a las dificultades, porque “la pesca siempre cambia con el tiempo” y que el problema no es “demasiado alarmante”.
Mantienen también que, aunque falten centollos y percebes y no haya tantos langostinos, otros productos, como “los de concha” y especialmente la almeja “escasean menos que los más comunes”. También los pescadores se lamentan de no haber hecho una provisión a tiempo para poder atender la alta demanda de estos días.
Olas de seis metros
Argumentos similares defienden desde la Lonja de Vigo. Coinciden en que “casi no hay percebes y poca centolla”, porque “con olas de seis metros salir al mar es imposible”. Así, en Vigo, el kilo de percebes, que suele “rondar los 80 euros estas fechas”, se está pagando “entre 120 y 150 euros”, aunque en los supermercados “te pedirán más todavía”.
Elsa, además, no solo está impidiendo las capturas de marisco, también de pescado: “La merluza está por las nubes, hasta a 20 euros el kilo; está todo muy caro, pero si no hay...”. El rape y el besugo, como la merluza, “han subido entre un 20% y un 30”, apuntan desde la ciudad olívica, donde igualmente señalan que el centollo se ha encarecido “sobre un 60%”. El producto que más escasea ha llegado a venderse "a 43 euros el kilo", cuando suele estar “entre 19 y 27, como mucho”.
Como sus compañeros de las cofradías de Pontevedra, indican que hay alternativas, como productos más fáciles de conseguir y menos caros. “La almeja tiene un precio más o menos estable” y ha subido menos, por lo que la consideran una buena alternativa estas Navidades.
La borrasca Elsa
Elsa ha dejado esta semana un panorama desolador en Galicia, también en Portugal, que acarrea el mismo problema de escasez. Los vientos de hasta 160 kilómetros por hora provocaron cortes de carreteras e inundaciones y el temporal fue especialmente intenso en la jornada del jueves. En Lugo se desbordó el río Miño, provocando inundaciones de amplias áreas, la suspensión de las clases escolares y el corte de carreteras. En total, se han registrado más de un millar de incidencias provocadas por Elsa en tierras gallegas a lo largo de la semana.
Galicia es la comunidad española más afectada, pero no la única, ya que Elsa ha causado problemas también en Andalucía occidental, donde el jueves cayeron hasta 100 litros de agua por metro cuadrado; Asturias, Cantabria y parte del Sistema Central resultaron también barridas.
Dos fallecidos en España
De hecho, la borrasca, que se ha juntado con Fabien, ha provocado ya seis muertes en España y otras dos en Portugal. Las tres últimas víctimas mortales son una mujer de 32 año en Madrid; un hombre de 67 en Huelva y un conductor en Huéscar (Granada). Antes de ello, el jueves por la tarde fallecía un hombre de avanzada en Santiago de Compostela después de que impactara sobre él un muro que se desplomó. A la otra víctima, otro hombre que paseaba por una pista forestal en la localidad asturiana de Puenxo, se le vinieron encima unas rocas tras un derrumbe provocado por el viento. En Vegas del Condado (León) murió el conductor de un tractor que fue arrastrado por el río al que cayó.
Los dos días más temibles eran las jornadas del jueves y el viernes. Presumiblemente, desde este sábado Elsa comenzara a remitir, aunque habrá que seguir teniendo mucha precaución en determinadas zonas.