Foment quiere un crecimiento “inclusivo” que pueda paliar la desigualdad creciente en las sociedades occidentales. La patronal que preside Josep Sánchez Llibre ha elaborado el primer informe de su think tank con dos propuestas que pueden provocar un debate intenso en el seno del mundo económico y empresarial. Reclama Foment un aumento del salario mínimo y “analizar la oportunidad de una renta mínima”. Y todo ello con la mirada puesta en Chile, donde se ha vivido en las últimas semanas una situación caótica, con el Ejército en la calle.
Sánchez Llibre lo ha manifestado de forma clara, al reclamar un crecimiento económico que tenga en cuenta “la cohesión” social, con el objetivo de que “tomen conciencia las patronales y los dirigentes europeos para evitar hechos como los que se han producido en Chile, donde hay muchos españoles e intereses de empresas españolas”. Esas escenas se pueden repetir en otras ciudades del mundo y en Europa, y para la patronal son producto de un gran malestar ciudadano, que no sabe cómo actuar ante un crecimiento económico que ha dejado de pensar en la igualdad. Más allá de denunciar políticas populistas o soluciones fáciles, Foment insiste en profundizar sobre las estructuras económicas y la realidad salarial, en cada ámbito económico.
Capitalismo "democristiano"
Las recetas de la patronal las ha elaborado el think tank que impulsó Sánchez Llibre al acceder a la presidencia de Foment. Se trata del Instituto de Estudios Estratégicos, que ha elaborado su primer informe, Por un nuevo pacto social. Ante los retos del capitalismo y de la democracia. El análisis para una defensa de un “capitalismo social de mercado”, un capitalismo “democristiano”, como ha admitido el propio Sánchez Llibre, jugando con su anterior responsabilidad como dirigente de Unió Democràtica.
La intención de Foment es defender sus propuestas en Madrid y en Bruselas, y buscar la implicación de la CEOE y de otros organismos e instituciones económicas. Lo que se defiende, como un camino de futuro, es “aumentar el salario mínimo y analizar la oportunidad de una renta mínima”, una idea, esta última, que ha sido demonizada por sectores liberales de la economía española.
"Valentía" para explorar medidas
Pero también se indica que se debe ser “valiente y explorar”, en palabras del vicepresidente y coordinador del think tank, Jordi Alberich. Para ello se piden “nuevas iniciativas de colaboración público-privada en ámbitos de interés general como la educación y la formación de los jóvenes”, que incida en la llamada “formación dual”. El diagnóstico que se hace es que la desigualdad excesiva es perjudicial para el propio sistema económico, el capitalismo democrático que impera en los países occidentales: “La desigualdad, la excesiva precariedad de muchos puestos de trabajo y los salarios bajos son un factor de inestabilidad y pueden poner en riesgo el crecimiento económico”, se señala en el informe.
Foment quiere arrastrar a las grandes empresas para que se impliquen en esa labor, la de fomentar un capitalismo “inclusivo”. Y se señala también que es vital avanzar hacia una “armonización fiscal que permitirá favorecer el consumo y la demanda interna, estimular la industria e impulsar a los emprendedores”.
Políticas antimonopolio
Una máxima de Foment, que ha defendido Jordi Alberich, es que el mismo mundo económico debe defender políticas “antimonopolio”. En ese sentido, Alberich ha aplaudido la senda iniciada desde la Unión Europea, aunque la deba intensificar, con el objetivo de “trabajar en políticas antimonopolio para favorecer el crecimiento económico, estimular la industria europea y aumentar la recaudación fiscal”.
El convencimiento de la patronal, de su laboratorio de ideas, es que un capitalismo inclusivo es, también, “más eficaz”. Alberich ha considerado que no es cierto que el capitalismo sin democracia, o en la versión de China, sea más eficaz, y que esa cierta predilección que corre en algunos sectores económicos puede ser contraproducente.
Esperar al nuevo Gobierno
Sin embargo, Foment no articula, todavía, un plan específico con medidas concretas. Sánchez Llibre, que ha presentado el informe, junto a Jordi Casas, Jordi Alberich y los vocales de la Junta del Instituto de Estudios Estratégicos, Rosa Vergés, Rosa Nonell y Luis Torras, quiere esperar el resultado del 10N y preparar un documento para el nuevo gobierno que se pueda constituir, centrado también en política fiscal.
En ese sentido, se han adelantado algunas cuestiones, que conectan con un primer informe de Foment. Lo ha recordado el economista Luis Torras, al señalar que el impuesto de Patrimonio se debería eliminar, que "sólo existe en Cataluña y Francia". Se trata de una petición de armonización fiscal que debería acometerse en toda la Unión Europea, a juicio de Foment.